martes, 30 de junio de 2009

Pandemia, country y darwinismo social.


Nacho Las Heras Pueyrredon toma la mano de su pareja y la aprieta fuertemente, mientras ella se persigna.

Da arranque a la Isuzu doble cabina 4x4, acelera y sale disparado contra el alambrado.

Avanza una docena de metros cuando comienzan a golpearlos las Molotov, trata de hacer zigzag, cuando de la nada aparece un camión de basura que los enviste.

Nacho queda inconciente; mientras que la Señora Las Heras Pueyrredon, aun conmocionada, reconoce a una de las figuras que se acercan con armas.

Solo atina a gritar; “Maria, no por amor de Dios, no”

La interpelada le responde, mientras apunta con una escopeta de dos caños; “Disculpe Patrona, es UD o mis cachorros”

Después de disparar, lanzan dos molotov más para que el fuego purificador mate la peste.

A lo lejos aun se ven las columnas de humo de Unicenter.

“Durante la peste negra del siglo XIV, Milán fue uno de los pocos lugares de Europa que no fue alcanzado por la epidemia, porque el obispo ordenó que emparedaran las tres primeras casas a las que afectó.

Los muertos, los enfermos y los sanos quedaron atrapados en su interior sin distinción.

El mayor auge de la ciudad fue alcanzado por Gian Galeazzo Visconti, duque de la ciudad entre 1351 y 1402”.

Un tema Tabú de las pandemias, es que en la antigüedad el contagio comenzaba por las clases altas, que eran prácticamente las únicas que tenían contacto fluido con el exterior de la comarca.

Las tablas cuneiformes y las crónicas chinas, latinas o árabes; coinciden en este tipo de transmisión espacial.

Robin Wood es uno de mis autores preferidos, vicio que arrastro desde la infancia, pero su visión apocalíptica esta errada.

El Darwinismo Social puede ser burlonamente macabro con sus defensores, ¿alguien escucho que se denominara enfermedad de la pobreza a la Gripe porcina?


1983, solo sobreviven los fuertes de espíritu.

No lo podía creer, pero no se trataba de creencias.

Lo impensado era realidad, no una pesadilla por la sandia con vino.

La confusión de las bases, mezcladas con las recriminaciones a los Mariscales de la derrota.

Estábamos moribundos, eran una agonía las sonrisas de los que se hicieron los boludos durante el Proceso, y ahora nos acusaban de cómplices.

Miles de corbatas y trajecitos sastre, que laburaban por la “Obra Social”, y la última semana del mes pasaban por ventanilla; de Marzo del 76 a Diciembre del 83.

Mientras nosotros éramos, como mínimo cesanteados o algo peor.

Los mismos, que con dedo admonitorio, lo puteaban al Tordo Miguel como colaborador; y cuando se les recordaba los años en gayola, con palizas y picana, saltaban con la respuesta inolvidable: “Por algo será”.

Zurdos de cotillon y fachos de ocasión; según la moda impuesta desde Clarín.

Pero cometieron un error, acostumbrados a sus rencillas endogamicas, donde al caído se lo intenta rematar; vinieron por nosotros.

En medio de la euforia por vencer a lo innombrable solo recuerdo unas líneas sensatas.

El astuto Bernardo Neustad había mirado los números, y basado en la experiencia vivida avisaba.

“Sacaron el 39%, un numero muy superior al 25% histórico de los Radicales, que les permitió sobrevivir a 40 años de hegemonía peronista.

Esa fue la base desde donde partió Alfonsin para ganar”

Algunos recordaran los primeros años de la “Democracia” con alegría, porque quizás estuvieron entre los ganadores, pero para nosotros fueron años amargos.

Había que empezar de menos cero; revisar todos y cada uno de nuestros principios, encontrar los errores y probar soluciones alternativas.

Reconstruir la confianza política entre nosotros, ganarse el respeto popular y el derecho de poder elevarnos al manejo del Estado.

Y todo ello entre dudas e incertidumbres, mientras que los Nosiglias boy’s no paraban de hacernos zancadillas, y Modart fue la mas inocua.

Ganamos en el único momento de tranquilidad, entre La Tablada y los saqueos, inmersos en el Golpe de Mercado que generaron los hasta ayer aliados de los representantes de la “Democracia”; los Capitanes de la Industria.

¡Que suerte perra!, hay que asumir de apuro, porque los corbatas y los trajecitos sastre desertan ante lo que “no supieron, no pudieron, o no quisieron”.

Con Estado de Sitio, hiperinflación, y el Muro de Berlín que se derrumba.

Es el “Fin de la Historia” gritaban los profetas del Discurso Único.

Tian’anmen se sumergía en la represión, mientas el Politburó del PCCh decretaba el nacimiento del “Socialismo de Mercado”.

Yeltsin, parado sobre un tanque, proclamaba el fin del “Socialismo realmente existente” y la Implosión de la Superpotencia.

En Nueva Zelanda y Australia, los laborismos giraban hacia al “Social liberalismo”, y se convertían en los “modelos” del neoliberalismo.

En España, se unían la UGT y las CCOO en Huelga General para enfrentar el desguace del Estado de Felipe González, millones de desocupados con rumbo a la exclusión.

El Sr. X organizaba las GAL, la Triple A anti ETA, y en medio de la cultura del pelotazo estallaban los escándalos de corrupción.

Fondos Reservados, Caso Roldán, Francisco Paesa, Caso Juan Guerra, Caso Filesa y Caso Rumasa.

¿Y por casa como andábamos?

¡En bolas, papa, en bolas!

Ron y Maggie eran los Reyes del Mundo, en el Titanic de la Globalización, y nosotros en la cubierta de 5ª.

No había referencias ni manuales que sirvieran, el Mundo era Unipolar, mientras los cubanos nadaban hasta Miami.

Si solo es viable el Capitalismo, recurramos a la Burguesía Nacional; pero Gelbard estaba tan muerto como la URSS.

Pero tenemos la Multinacional Argentina, Bunge y Born, que se habían amigado con la Tendencia.

¡Pero lo que es tener mala leche!, se nos muere el Ministro de Economía y hay que rajar al imbecil del Presidente del BCRA; un gilastrun de la UCD que asumió diciendo que se había preparado toda la vida para ese momento.

Al Turco no le queda otra que llamar al “Contador sin imaginación”, Erman González.

Rapanelli, termina siendo una tapa de Pagina 12, donde dice; “tocado”.

Supererman como comodín mientras se resuelve que barajo hacer.

Recordemos que estábamos en el Ten Top mundial de inflación.

A seguir buscando el burgués nacional, y los Compañeros Federales insisten que hay que hablar con la Burguesía del interior.

Que tienen una Fundación en Córdoba, llamada Mediterránea, y que el canciller de ese momento era el ideólogo.

“Che Feudal, le preguntaba a un Compañero con tonada, poner a Cavallo en RREE para no tener quilombos con USA lo comprendo.

Pero como ministro de Economía me parece aflojar demasiado”

“Quédate tranquilo Mazorquero, como decía Enrique Vázquez en Humor año 82, es uno de los tipos que mas sabe; y esta enfrentado a la Oligarquía Portuaria, que subyuga a las pobres provincias”.

En fin, vino la Convertibilidad, y con ella regresaron los corbatas y los trajecitos sastre; con todo el cotillon que tenían encima, y ocultaba el enano fascista, se proclamaron la izquierda posible.

Las indemnizaciones y planes de retiro anestesiaban el “giro copernicano”, poco a poco nos convertíamos en un país de kioscos y remises.

“Che, Feudal, esto se va a la mierda”

“No hinches las pelotas Mazorquero, en el fondo hacemos lo mismo que los Socialistas españoles”

“Si, pero a ellos los banca la CEE, y yo no creo que nos quiera bancar el MERCOSUR”

Llego el año 95, y al Turco se le hacia difícil la reelección; él no se consideraba un ave de paso.

Así que, mientras Tachuela esperaba en la cancha de tenis de Olivos, en pantalones cortos; Alfonsin salvaba la Republica y la Democracia en una habitación.

Mientras puteabamos por lo bajo, a la perfección de la Convertibilidad le sobraba la corrupción peronista.

¡Lo que es tener mal marqueting!; mientras Izquierdas y Progresistas formaban la Alianza, y se transformaban en los Garantes del funcionamiento cristalino de la Convertibilidad; nosotros éramos los elementos disociadores que pretendían cambiar el rumbo.

“Es porque pierden los privilegios y las coimas” nos decían; “la Economía anda mal porque hay corrupción”, remataban.

En fin, si hay algo peor que perder una elección, es ir a una sabiendo que perdes irremediablemente.

Solo queda presentarse y dar testimonio.

“Se pudre, que se pudre todo”, avisábamos al pedo; y López Murphy remplazaba a Machinea.

Ya el cotillon había desaparecido; recortes de sueldo y jubilaciones, banelco, y los palos de Gendarmería en el Interior.

Mientras de la Rua jugaba con Rucucu, a ver a quien se le prendía fuego el rancho primero, la opción popular eran “Créditos de trueque” o Patacones.

La feta de salame en lugar de la lista sabana solo era el anticipo de los saqueos; que como siempre comenzaban en el Interior, específicamente en territorios no P.

Fue así en el 89, y también en el 2001; como si fuera una versión burlesca de Cambalache.

Estado de sitio y helicóptero; los corbatas y trajecitos sastre imitando a Terminator, o sea, rajando y prometiendo “Volveremos”.

¡Mierda!, como decía Mirtha Legrand, otra vez a asumir de apuro; en medio del quilombo.

Todo el mundo cagado en las patas, tratando de evitar echar mano a las herramientas Constitucionales para restablecer el Orden Publico.

Estado de sitio (firmado y publicado por FdlR), Censura Previa (Firmado, pero sin tiempo para publicar FdlR), Toque de Queda y ley Marcial (Firmado FdlR, y extraviado, a penas llego el primer peroncho a Balcarce 50).

Aunque es historia conocida; volvieron a pasar del zurdaje de cotillon “Piquetes y cacerolas, la lucha es una sola”; al fascismo de ocasión “Putos de mierda, me cagan la vida, hay que cagar a palos a estos parásitos, rompen las bolas y encima les dan el plan, quedamos como la mierda ente el Mundo, con los Milicos esto no pasaba”.

El resto paso solo hace siete años, se salio a los ponchazos; emparchando con lo que había, y no era mucho que digamos.

Se maniobro para dejar en orsay al Turco, a López Murphy (el que recorto salarios y jubilaciones), a Carrio (que comenzaba su travesía de Gorda periférica y provinciana, a Gorda chic y de Barrio Norte) y al Adolfo (querido como vas a hacer entrar por la puerta principal de Balcarce 50 a Carlitos Grosso).

Así que, después de este relato llevo de subjetividad, perder el domingo no es el Fin del Mundo.

No te gano de la Rua como en el 99, ni entran en crisis tus creencias como el 83, tampoco hay que asumir entre las llamas como en el 89 y el 2001.

¿Pude ser el 97, o el 87 para Alfonsin?, que se yo, cuando llegue el momento veremos.

Ahora los dejo para escuchar al Dúo Dinámico, que es de mis tiempos de adolescencia, y sacaron en el 87 un Himno.

http://es.wikipedia.org/wiki/Felipe_González

http://es.wikipedia.org/wiki/Dúo_Dinámico