miércoles, 15 de febrero de 2012

“El Puente sobre el río Kwai”, la precuela de “El Planeta de los Simios: (R)evolución”.




¿Qué sucede cuando la superestructura institucional se desmorona, y se pone en riesgo la razón ultima que justifica al Leviatán de Hobbes, el “control de la calle”?

Desde Davos, lugar crematístico por definición, se responde con un concepto, Gobernanza.

Que no es más que la Gobernabilidad de la Trilateral de los 70, cuando se apelo a los Partidos Militares del 3º Mundo, para imponer el Orden del Mercado frente al caos populista.

El Mercado, y sus Inversores, a pesar del AgitProp de sus Voceros, siempre se llevaron bien con los Manchesterianos de Izquierda, los discípulos de Carlos y Federico; al fin y al cabo todos son Internacionalistas y asumen como inevitable la diferenciación en Clases.

Lo que les saca de quicio son los Bonapartismos, esos populismos de Derecha (Bismarck) o de Izquierda (Lasalle); que creen que es posible superar desde la Nación, como Comunidad de Destino, las Contradicciones de Clase.

En fin, con la candonga de la Crisis, provocada por el Mercado; y no por el Estado de Bienestar, como arguyen los herederos de Maggie y Ron, que liquidaron a este en las décadas de los 80 y 90.

No solo hay “efecto pobreza” concreto, que se palpa en todo el mundo, sino que además, los jirones del Estado y Sistemas Políticos existentes se las ven canutas para “paliar” el Triaje Social en Marcha.

Aun el GOP, el partido Republicano de USA, una de las fallidas “esperanzas”  reformistas de Marx en las décadas de 1860/70; se ve en figurillas para que el Ideologismo de los Tea Party no los termine liquidando como Opción de Administración.

Es cierto que quedan los “Cañones”, el Poder Organizado; pero en las actuales circunstancias sociales y económicas, no garantizan un Status Quo que sea estable, en el Atlántico Norte.

Demasiados Lumpen, desesperados por el desempleo, han integrado sus filas; están más cerca de las Legiones de Mario que de las Hordas Disciplinadas de Moltke el Viejo.

En Davos, asumen, que hay docenas de pichones de Hugo Chávez; empotrados en las filas de las FFAA de la OTAN.

No están preparados, psicológicamente, para enfrentar fenómenos como el Caracazo de fines de los 80.

Entonces, analizan toda brizna de información, sobre aquellos regimenes que han logrado sobrevivir en el ultimo ¼ de siglo, sin apelar a la manu militari; aka, sin Plaza de Tiananmen, o similares.

El leproso de la Globalización Financiera, es uno de ellos; zafo no de una, 2001, sino de dos Implosiones Sociales; 1989, con la Híper y los Saqueos por Hambre, fue tan grave como la del Helicóptero.

Ahora bien, la Resiliencia no fue un acto de Deux et Machina; al igual que la Persistencia del peronismo, no son malabares aptos para los filósofos, que sueñan con su “erradicación”.

Hay mucha historia de praxis que se ha enterrado bajo la alfombra de la Academia, porque no se sabe que hacer con las evidencias que contradicen las Teorías Hegemónicas.

La simple mención de que, potencialmente, puede ser una Contracultura Popular; una Moral Utilitaria de los Esclavos, los pone histéricos.

Seria asumir que ellos, la Intelligentsia, son los bufones al servicio la Maquina Burocrática del Despotismo.

“El discurso filosófico nació de la unidad imperial, a través de muchos ava­tares, los mismos que conducen desde las formaciones imperiales hasta la ciudad griega.

E incluso en la ciudad griega el discurso filosófico mantiene una relación esencial con el déspota o con su sombra, con el imperialismo, con la administración de las cosas y de las personas (se encuentran todo tipo de pruebas de ello en el libro de Léo Strauss y Kojève sobre la tiranía) (e).

El discurso filosófico siempre ha permanecido en una relación esencial con la ley, la institución y el contrato que constituyen el problema del Soberano, y que atraviesan la historia sedentaria que va de las formaciones despóticas hasta las democráticas.

El «significante» es en verdad el último avatar filosófico del déspota”.

La “Marcha del coronel Bogey”, hacer clic aquí, no solo esta relacionada con el golf; para muchísimos, entonarlo, es una demostración de Resistencia Organizada, en la peor de las Situaciones; hacer clic aquí.   

Ahora que los Hooligan son Freedom Fighters, que luchan en la Primavera Árabe; recuerdo cuando la hinchada de Chicago marcho, con los brazos en alto, al ritmo de “Arroz con Leche” durante el Proceso.  

La Prisiones, literales o simbólicas, siempre han sido un espacio en disputa; y mucho mas cuando es imposible, materialmente, eliminar a los prisioneros.


Si en vez de las estúpidas panteras
y los férreos estúpidos leones,
encerrasen dos flacos mocetones
en esa frágil cárcel de las fieras,
No habrían de yacer noches enteras
en el blando pajar de sus colchones,
sin esperanzas ya, sin reacciones
lo mismo que dos plácidos horteras;
Cual Napoleones pensativos, graves,
no como el tigre sanguinario y maula,
escrutarían palmo a palmo su aula,
buscando las rendijas, no las llaves...
¡Seas el que tú seas, ya lo sabes:
a escrutar las rendijas de tu jaula!



Así cantaba el vate matancero hace un siglo, en sus Sonetos medicinales; tan llenos de rencor y revancha, que asustan a quienes los leen por primera vez, sin ser nativos de la zona.

Pierre Boulle, ingeniero, resistente en lejano oriente y gaullista de Gauche; por ser el autor, enlaza “Le Pont de la rivière Kwai” y “La Planète des singes”, hacer clic aquí para la biografía.

Lo que tienen en común ambos es la “inversión de los papeles sociales durante la Opresión”; en Kwai los “blancos” deben trabajar para los “amarillos”, como si fueran despreciables coolie.

En el Planeta, la inversión resulto obvia en la década de los 60, los hombres “blancos” eran bestias al servicio de los Simios “negros”.

Ahora bien, Kwai como film, mostró las limitaciones de los tiempos de las listas negras; hacer clic aquí.
Carl Foreman y Michael Wilson estaban en la “lista negra”, y para salvar las apariencias, se publico que Pierre Boulle fue el guionista.

Por supuesto, el francés no fue a recibir el Oscar al mejor guión; con la escusa que no “hablaba ni una palabra en ingles”.

Años más tarde, Michael Wilson fue el guionista de la primera del Planeta, avisando que el guión se inspiraba en la obra de Boulle.

Ahora bien, los prisioneros blancos que trabajaron en el Kwai, se sintieron ofendidos por como retrataron al “negociador” comandante británico.

Sir Philip Toosey, hacer clic aquí, era considerado por los prisioneros de guerra como un héroe; un oficial caballero, que siempre defendió la vida e integridad de sus subordinados.

Al fin de la guerra, dio testimonio a favor del Sergeant-Major Saito, el Jefe del Campamento; porque a pesar de la brutalidad de la tarea, siempre mantuvo la ecuanimidad en el tema de alimentos y medicamentos.

Boonpong Sirivejjabhandu, el agente de Mercado Negro, no podría haber logrado llevar medicamentos y alimentos a los prisioneros sin la vista gorda de Saito.

El Lieutenant Colonel Sir Ernest Edward "Weary" Dunlop, Medico Jefe del contingente australiano, también reconoció la labor de Sirivejjabhandu.

Como esto se esta convirtiendo en un baturrillo, para sintetizar, solo es posible el éxito de “El Planeta de los Simios: (R)evolución”, si se tiene atrás el Capital Simbólico y Organizativo de “El Puente sobre el río Kwai”.
Como plantea el informe Vanderbilt, o Cultura Política de la democracia en la Argentina 2010; el país mas contencioso de la Américas tiene una larga, y rica, historia de Protesta y Resistencia exitosas.

A tal punto, que la Protesta en si, se considera como un recurso integrado al funcionar republicano y democrático; ver Capitulo VIII, paginas 227 y siguientes.

Lo que complejiza cualquier intento a lo Curzio Malaparte, Revolución de Colores, o Primaveras Digitales; hay demasiada densidad del entretejido, en la Sociedad Civil.

Obligando a emular, para poder ejercer la Gobernanza, la distribución geográfica y social del Partido Dominante.

Que en lugar de silbar la “Marcha del coronel Bogey”, lo hacen con la Marchita de otro Coronel.


PD, si lo consideran insuficiente, siempre tienen a mano a Grondona, Abraham y Feinmann, para que les expliquen lo que sucede o va a suceder.



6 comentarios:

rib dijo...

Por suerte el PJ tiene quien le construya un futuro ...

http://www.osisko.com/pdfs/Board_Charter.pdf

Anónimo dijo...

Dice el blogero: Lo que tienen en común ambos es la “inversión de los papeles sociales durante la Opresión”; en Kwai los “blancos” deben trabajar para los “amarillos”, como si fueran despreciables coolie.

En el Planeta, la inversión resulto obvia en la década de los 60, los hombres “blancos” eran bestias al servicio de los Simios “negros”.

Al igual -agrego D. Manolo- que el Congreso de la Nación donde la máxima aspiración de los legisladores es "engancharse" a los sueldos que discute APL o la de los señores Ministros del PEN que esperan el resultado de las paritarias Estado-UPCN-ATE para definir su sueldo. Atte. Sergio Robles.

Anónimo dijo...

Mario y Sila? Manolo, Manolo

ayj

Solo le falto Pareto y la circulacion de elites en marcha, es el tiempo de los leones

Charlie Boyle dijo...

"Solo es posible el éxito de “El Planeta de los Simios: (R)evolución”, si se tiene atrás el Capital Simbólico y Organizativo de “El Puente sobre el río Kwai”.
Acto 1
Deje el post un par de meses para que lo entiendan los simios.
Esta sentencia es de antología y se tendría que enseñar en las escuelas sobre todo si éstas, en un país alfabetizado como el nuestro ha machacado con todo una parafernaria de capital simbólico desde Ricardo Rojas hasta acá.
Acto 2
Entendido esto un fuego fauto se apoderará del Planeta de los simios de a poco y lo extinguirá o, será salvado antes de su exintinción por un delarúa como tantas veces se hizo.
Acto 3
Como dice el Compañero Moyano, terceras partes siempre fueron malas, el ciclo argentino es de 10 añitos.
Acto 4 Moraleja
Cuando el brazo filosófico de los imperios ha penetrado el planeta de los simios, podrá haber avances o retrocesos. (Incluya dentro de los imperium las religiones y todos los órdenes jerárquicos.) LA única posibilidad que tienen los simios es el swarming y el crunching, que para el imperio es solo una cosa de número. LA resiliencia no se lleva bien con el número y se llevará mucho s simios puestos.

Marmaduke/Eddie/Matt dijo...

MANOLO: Mencionás al Partido Republicano como "una de las fallidas 'esperanzas' reformistas de Marx en las décadas de 1860/70". Y si, ha pasado mucha agua bajo los puentes, como quien dice. El último estertor reformista del GOP lo dio Theodore Roosevelt con su Partido Progresista; de allí en más se convirtió en lo que dijo Coolidge: "the business of the United States is business". Cuando Lyndon Johnson firmó el Acta de Derechos Civiles los últimos segregacionistas (esclavistas) que aún quedaban en el Partido Demócrata lo abandonaron y se hicieron republicanos. Nixon entendió como venía la mano y con su Southern Strategy completó el viraje y el "Solid South" terminó absolutamente republicano. Y los demócratas terminaron con un regalo que hubiera sido impensado en los tiempos de Marx (Carlos): el voto negro.
Eddie

Anónimo dijo...

...lo mas interesante del planeta de los simios es que se deja ver a que cosa exactamente le tienen miedo...

TioVIK (desde una PC prestada)