miércoles, 20 de noviembre de 2013

Coronel Gonorrea (¿saqueos?), solo se entera la servidumbre, y los monitores de la NSA.




En tiempos que cualquier guachin sube la foto de un pete, realizar una campaña de grafica es pre Orson Wells y la Guerra de los Mundos.
Con Crítica de Argentina lo intento Lanata, dos colectivos de La Plata haciendo bardo en Gaona y Libertador; Moreno.
Un urgente en el Portal sobre la multiplicación de incidentes en Barrio Las Flores, cerca del Cruce Castelar.
Los blogeros de aquella época lo encaramos al “responsable”, porque la data no cuadraba por ningún lado.
Su única explicación es que lo había “chequeado” con sus “fuentes” de tribunales, que estaban en Morón.
Para que nos entendamos, 2 colectivos frente a Carrefour de Liniers, saqueos en Flores Sur; los tribunales en Palermo, y el Periodista en San Isidro.
Y los móviles ya sacaban fotos, que se pasaban por Bluetooth a la compu para distribuirlos por mail.
En fin, el problema no es la mediocridad, sino el desconocimiento de las herramientas de que se dispone.
Saqueos en tiempo real implica foto y twitter, o filmación y youtube, y a partir de allí virilizar.

PD, el coronel sabrá disculpar el uso de su imagen como consumo irónico, en las redes sociales sobran los faunos de Andy Warhol que creen ser COINTELPRO.
Y escasea algo tan simple como los referencistas de bibliotecas, para cribar data y analizarla.

PD bis, ¿es posible “montar” una operación de este tipo?
Hay varias maneras, con o sin cultivo previo, desde ya no lo voy a explicar en un post.
Pero insisto, con los smartphones de por medio, se vuelve complicado; termina siendo mas sencillo inventar el video hot de la Sueca.

1 comentario:

guido dijo...

Los saqueos son un poco como las tomas de tierras. Tienen una presencia constante, estacional, desde hace por lo menos dos décadas. Pero solo explotan políticamente (y se viralizan y expanden, saliendo del suceso local y compartimentado) cuando hay una decisión política de convertirlos en imágenes que salen de los barrios que al país le chupan un huevo a la vidriera nacional de los canales de televisión porteños.