“Creo que hay un choque muy importante en la Argentina entre
el deseo de varios políticos de enfatizar la diferenciación izquierda-derecha
(que es muy real), y la realidad electoral y sociopolítica a nivel “masa” (para
usar categorías comunes en electoral behavior en las ciencias políticas), que
está solidamente diferenciada en la otra dimensión, es decir culturalmente,
peronismo y no peronismo, y más genéricamente (y para mí más exactamente) alto
y bajo.
¡Ese choque es el drama de la política argentina desde hace
ya más de seis décadas!
Este deseo siempre se topa con esa realidad.
Y a eso hay que añadirle los numerosos políticos que no
tienen ningún deseo de transcender esa dicotomía, sea por pragmatismo de poder
o sea por aversión, estilo, “valores”, o imagen de sí mismo.
………….
Pero también, siguiendo contestando de frente su pregunta,
es “consolidación de nada” en el espacio político.
Pues el peronismo no necesita de los Kirchners para
consolidarse como expresión de poder, ya que lo es de todas manera a nivel
electoral, local e identidario.
…………
Sobre su otra pregunta, más fácil, los dos clivajes
políticos existen fuertemente en la Argentina.
Siempre insisto que el espacio
político argentino es bi -dimensional.
Y lo es absolutamente, con las dos dimensiones
perpendiculares una con la otra.
(Eso no es el caso, por ejemplo, entre el eje
económico y el eje cultural en EEUU, donde se observa un “ángulo agudo” entre
ambos ejes, es decir, en donde un liberalismo cultural y lo que ellos llaman
erróneamente un liberalismo económico se enfrentan a un conservadurismo económico
y a un conservadurismo cultural.)
Esa perpendicularidad da más opciones de alianzas posibles
en la Argentina.
Creo que dentro del no peronismo, los políticos e
intelectuales se ven a sí mismos enteramente diferenciados por el eje izquierda-derecha,
pero que a nivel sociocultural la diferencia entre lo alto y lo bajo en la
Argentina es mucho más fuerte.
Esto se nota sociológicamente, por ejemplo, en las redes
sociales y familiares.
La diferenciación entre alto y bajo es una clave fundamental
de la realidad argentina, que va mucho mas allá del estilo -simple expresión de
algo mas sociológico-.
De hecho, la Argentina se caracteriza por una clase media
comparativamente culta y leída (en contraste, por ejemplo, con la de EEUU), o
que lo aparenta, y por sectores populares que muchas veces no tuvieron acceso a
eso y que tienen otra imagen de sí mismos”.