¿El huevo o la gallina?, el dilema de la continuidad en el
tiempo de Cambiemos.
Sin “inversiones” el peronismo, en sus formas más
virulentas, “retorna” en 2019.
Y, como “podría” retornar en 2019, no “habrá” inversiones.
Y, si esto fuera poco, no se observa en el horizonte un
potencial “Cafierismo” que “garantice”, como en 1987/89, una “retirada ordenada”
del Republicanismo.
Derivando en un Neo-menemismo que “moncloize” el eje izquierdas derechas, en lugar del
arriba abajo.
No se trata de cuestión de fe ideológica, es puro y simple probabilística
del mecanicismo social.