La oligarquía no le temió, ni le teme, por su origen genético
o su condición de “natural”; sino por su construcción y aportes organizativos.
Lo visceral que lo antagonizo, y antagoniza, es la burguesía
semicolonial; que veía amenazadas sus “situaciones” en el Orden Conservador y
sus castas a la chilena.
El Patriciado de Barrio Norte, los empleados de Caballito y
Flores, y mas allá la “inundación”.
Juancito Sosa, nieto de quichuizados y tehuelches, de tanos,
gallegos, vascos y escoceses.
Profesional de la Violencia, eterno estudiante por su curiosidad
voraz, trataba a los demás como si fuera un monje zen.
Construyo su propia montura para cabalgar los reclamos
sociales en la tormenta de la historia.
A más de 40 años de su muerte, todavía mantiene el aura de Tabú.
Un historiador dice que era hijo natural de una india
Pese al misterio, Perón aclaró las dudas
A todos aquellos ciudadanos que puedan interesarle.
Gracias Juancito, como diría Cyndi Lauper
¡¡ PRESENTE MI GENERAL !!
ResponderBorrar