Apagón precoz y el escenario 20, 20, 21

“Si algo pude suceder, probabilisticamente hablando, seguro que sucederá”.

Principio empírico.

La “prevención”, descular que puede salir mal y corregirlo antes que suceda, es algo fundamental.

Desde lo macro, sistemas económicos o redes interconectadas, hasta lo micro mas elemental como el sexo.

Los forros no solo se usan para prevenir embarazos, hay múltiples opciones más allá de los profilácticos, sino para evitar las enfermedades venéreas.

Por eso siempre han sido parte del “equipamiento” de las FFAA, por ejemplo.

El “apagón del Cono Sur” no solo era “probable”, además se “sospechaba” en base a las “decisiones políticas” de los últimos 4 años.

Lo “optimo” era que sucediera en el verano 2020/21, el regreso del populismo practico, con el “aumento” del “consumo irracional y demagógico”.

Pero dos “excesos”, consustanciales con la actual Administración, generaron la “precocidad” del “fenómeno”.

La Codicia “desaforada” y el Optimismo de “la culpa es del otro”, generaron un “milagro operativo”; en pleno invierno, y con niveles de subconsumo, se logro 50 millones de clientes Unplugged.

La cuestión de fondo ya no es “ganar las elecciones 2019”, sino “sobrevivir” a los años 2020 y 2021 con un “aparato administrativo” literalmente convertido en “tierra arrasada”

Con la “maquinaria de difusión” lista para saltar a la yugular por la falta de vacunas y medicamentos, energía, insumos productivos, hasta papel higiénico y compresas femeninas, etc., etc.

¿Pesimismo de Murphy?

Mas bien paranoia de Andrew Grove.