Se equivocó la paloma.
Se equivocaba.
Por ir al Norte, fue al Sur.
Creyó que el trigo era agua.
Se equivocaba.
Todos vivían la ilusión sobre la Europa transplantada, no eramos América latina.
Buenos Aires era Paris, una ciudad de blancos donde se combinaban todos los lenguajes civilizados.
El fin del conflicto permitia visualizar un futuro promisorio, sobrepasando a las agotadas naciones centrales.
Los mas lucidos como Pinedo, reconocían el agotamiento del modelo y el cambio de Guardia Imperial.
En un Desarrollismo avant la lettre, bosquejaban el camino a seguir.
El arco partidario, desde el PC hasta los DP, reconocían la necesaria participación sindical.
La memoria del auge alvearista, con su manteca al techo y anclados en Paris, prometía repetir la fiesta.
Pero llegaron los que no estaban invitados, reclamando que se cumplieran los Programas, como en Inglaterra o Francia.
Si vamos a ser civilizados, hay que hacerla completa, como decía Olmedo.
Las leyes laborales hay que cumplirlas, la participación en el ingreso no debe ser una aspiración.
La reparación y equidad social no podía ser solo un lema, recordemos que USA recién las promulgo 20 años mas tarde con LBJ y la Gran Sociedad.
La participación Obrera en la microeconomía solo seria reconocida en Alemania en los años 50.
Pero lamentablemente no estuvimos a la altura de las circunstancias.
Nuestras élites y burguesía no reaccionaron como europeos; ingleses, franceses, italianos o alemanes.
Reaccionaron como latino-americanos.
Los podemos reconocer en la desmesura de los opositores a Chavez, o en la soberbia de las élites chilenas, que aun agradecen a Pinochet haberlos llevado al 1ª Mundo.
Aunque sean uno de los países mas desiguales de América.
Ese humor bilioso aun sigue presente, la nostalgia por el Paraíso Perdido es proclamada a los cuatro vientos.
El resentimiento ante los impresentables usurpadores sigue estando a flor de piel.
Por eso no voy a recordar la alegría de la marcha, ni la década gloriosa en si misma.
Prefiero que los mas jóvenes vean como nos trataron.
Que métodos utilizaron para que volviéramos al lugar que nos correspondía en la Historia.
Son los mismos que utilizaron en la Moneda, los personajes son idénticos a los Carmona.
Los foros de La Nación chorrean resentimiento.
Los blogs no republicanos son asaltados verbalmente, tratando de provocar una reacción destemplada.
Todo bajo la protección del anonimato y la libertad de expresión.
La fantasía de alcanzar el balotaje se superponen con el deseo del estallido.
Como los Bersuit en Venezuela.
Si no sucede ninguna de las dos cosas, estallaran en un frenesí psicotico.
No es un problema de izquierda o derecha, tampoco tiene que ver con el Liberalismo o el Socialismo.
Es mas primario, odio de clase, los privilegiados no soportan ser superados.
Destruir, aplastar, quemar, bombardear a todas las cucarachas.
Quizás estoy demasiado viejo y paranoico, pero como Coto, yo los conozco.
Solo son élites y burguesías parasitarias de Factoría.
