Los
opositores concluyeron que los resultados en la ciudad cordobesa (Marcos
Juárez) marcan la tendencia nacional del desbande
kirchnerista porque sus candidatos no arrimaron, juntos, ni al cinco por ciento
de los votos.
…….
La
traslación automática del resultado de Marcos Juárez a un futuro escenario
nacional parte de un análisis sesgado y de una
transferencia del deseo que puede chocar con la realidad.
Walter
Palena / La Capital/ Domingo, 03 de octubre de 2010.
No hay falta de respeto, ya que ambas localidades
tienen un volumen electoral similar.
Lo “jugoso” son los marcos “interpretativos” que se
dan desde lo llamado “nacional”.
Por ejemplo, se minimizaron las internas del PJ de
Rio Negro, al fin y al cabo un pecata minuta del “centralismo” mediatico.
Pero lo inaudito es que los ultras de la
Institucionalidad Republicana “ninguneen” la interna de la UCR de la PBA.
Que solo el 10% de los 700.000 afiliados cívicos hayan
ido a votar, puede ser un dato relevante en más de un sentido.
Por un lado tenemos la falta de “motivación” para
movilizarse, aun dentro la disyuntiva Macri si o Macri no, ver los mendocino
Sanz y Cobos.
Por otro lado para cualquier “armado” 2015, sea
Pan-radical o Pan-republicano, esos 70.000 militantes son la diferencia entre
un resultado “digno” o un “papelón” en la PBA.
Distrito con el 40% de los votos, donde ni la UCR
(+/- 14%), ni el PRO (- 10%), logran hacer pie.
A tal punto que la “hipótesis” de los 3 tercios, tripartición
asimétrica; es remplazada por la “hipótesis” de los 4 cuartos, cuatripartición”
donde el llamado “tercio republicano” es la puerta 12 para quienes enfrentan la
Lista 2.
Volviendo a Marcos Juárez, la principal diferencia
con 2010 es que el “Vecinalismo” se partió, y gano una de sus fracciones aliada
a la UCR de Córdoba; ver la crónica de La Capital de Rosario que encabeza este
post.
El Kirchnerismo puro y duro repitió el 5%, mientras
que el +ismo preferido desensillar hasta que aclare para el Gallego de la Sota.
Otro tema que queda en el tintero, ya que se trata
de la Pampa Gringa, son las definiciones de Eduardo Buzzi; “voto del campo”, “voto
de la ruralidad”, y “voto de la ruralidad urbana”.
Que son claves para “interpretar” el “eje del Carcarañá”,
o la Región Centro “ampliada”.
Entre Ríos, Santa Fe, Córdoba, PBA y La Pampa; sin
los “aglomerados urbanos”, que van del GBA, Rosario, Córdoba Capital, Rosario, Paraná-Santa
Fe Capital, y General Pueyrredon.
Aunque quedan en duda los aglomerados superiores a
los 150.000 habitantes, como Bahía Blanca, Rio Cuarto, Concordia, etc.
Quizás no se comprenda la magnitud del volumen
electoral, unos respetables 5.000.000; repartidos de la siguiente manera.
PBA 45%, Córdoba, 25%, Santa Fe 20%, Entre Ríos 9%,
La Pampa 1%; a ojo de buen cubero.
Sin ellos, para el Pan-radicalismo o
Pan-republicanismo, es una utopía descontar el peso de las Secciones del GBA, y
“terciar” en el potencial balotaje.