Este post
era para el trigésimo aniversario del Holocausto del 83; pero al leer, y
escuchar, tanta plañidera gimoteando; prefiero adelantarlo.
De ser
menos que la nada, condenados a desvanecernos como un “cuerpo insepulto”, en la
mas absoluta indigencia presupuestaria y comunicacional.
RA había
ganado el PEN, PLN, la PBA ,
los municipios del 1º Cordón; tenía el MONOPOLIO de los Audiovisuales, que
Menem privatizaría.
Acusados de
ser incapaces de gestionar una calesita; a la vez que, por nuestras internas a
los tiros, ser una AMENAZA para la Gobernabilidad y el Estado de Derecho.
Nos
reorganizamos, lanzamos una interna presidencial, con una participación de
afiliados superior a las Socialdemocracias nórdicas y germanas.
Mientras
todos y todo, a lo largo de las décadas, se desmoronaba; terminamos por
remplazar al Sistema y el Estado.
Y, hasta “infiltramos”
a uno de los “nuestros” en la
Burocracia mas antigua de Occidente. ;-P
En fin,
para que seguir; si es como tratar de enseñarles como armar postas de buzones y
señales; antes de la ZX Spectrum ,
impresoras matriciales y los beepers.
Si ven el BlackBerry 7000 de mi trabajo y creen que
es una tablet “compacta”
Si puedes
mantener en su lugar tu cabeza cuando todos a tu alrededor,
han perdido
la suya y te culpan de ello.
Si crees en
ti mismo cuando todo el mundo duda de ti,
pero
también dejas lugar a sus dudas.
Si puedes
esperar y no cansarte de la espera;
o si,
siendo engañado, no respondes con engaños,
o si,
siendo odiado, no te domina el odio
Y aun así
no pareces demasiado bueno o demasiado sabio.
Si puedes
soñar y no hacer de los sueños tu amo;
Si puedes
pensar y no hacer de tus pensamientos tu único objetivo;
Si puedes
conocer al triunfo y la derrota,
y tratar de
la misma manera a esos dos impostores.
Si puedes
soportar oír toda la verdad que has dicho,
tergiversada
por malhechores para engañar a los necios.
O ver cómo
se rompe todo lo que has creado en tu vida,
y agacharte
para reconstruírlo con herramientas maltrechas.
Si puedes
amontonar todo lo que has ganado
y
arriesgarlo todo a un solo lanzamiento ;
y perderlo,
y empezar de nuevo desde el principio
y no decir
ni una palabra sobre tu pérdida.
Si puedes
forzar tu corazón y tus nervios y tus tendones,
para seguir
adelante mucho después de haberlos perdido,
y resistir
cuando no haya nada en ti
salvo la
voluntad que te dice: "Resiste!".
Si puedes
hablar a las masas y conservar tu virtud,
o caminar
junto a reyes, y no distanciarte de los demás.
Si ni
amigos ni enemigos pueden herirte.
Si todos
cuentan contigo, pero ninguno demasiado.
Si puedes
llenar el inexorable minuto,
con sesenta
segundos de lucha bravia...
Tuya es la Tierra y todo lo que hay en
ella,
y lo que es
más: serás un hombre, hijo mío.
Soy tu
Enemigo, el primero que has tenido que a sido mas listo que tú.
No hay más
Maestros que el Enemigo, Ender Wiggins.
Nadie,
salvo el Enemigo, te dirá lo que hará el Enemigo.
Nadie,
salvo el Enemigo, te enseñara a destruir y conquistar.
Soy tu
Enemigo a partir de ahora.
A partir de
ahora soy tu Maestro.
El juego de
Ender.
Orson Scott
Card.