martes, 29 de mayo de 2012

Argentina y la supervivencia frente a la Crisis Global; los Naipes desafían al PlaySation.



El país está que arde.

Sin embargo, el sector que debería proveer alternativas sensatas pierde su tiempo jugando a las bolitas.

No le ha sido suficiente la paliza recibida en las últimas elecciones, como resultado de su empecinamiento en presentarse dividida.

No escucha la indignación ciudadana, que critica su rol de pigmeos.

Igual que el oficialismo, la oposición vive en una burbuja.

La diferencia consiste en que el oficialismo abarca un gran arco que va desde la extrema izquierda hasta la extrema derecha (Hebe de Bonafini y D'Elía, para ilustrar con nombres) y aspira a mantenerse en el poder a cualquier costo.

La oposición, en cambio, no sabe construir su propio gran arco, ni cómo presentarse, ni por dónde marchar, ni cómo aumentar su influencia.

Es cierto que se destacan figuras dignas en el espectro opositor.

Pero, con escasos nombres, sus respectivas agrupaciones no se deciden a asumir el estado crítico de la República.

Por eso no se apuran en desarrollar mecanismos de articulación y definir programas de largo alcance.

No construyen el edificio de una alternativa sólida, confiable, racional y patriótica, concentrada en los temas centrales, con vistas a un futuro sólido, sobre los cuales no existen diferencias de significación.

Hasta ahora no han establecido comisiones mixtas de trabajo y proyecto, no han convocado a los cientos de especialistas capaces en todas las áreas que posee nuestro país.

Se limitan a unas patéticas danzas de comité.

A soñar con un protagonismo que les caerá por arte de magia.

No advierten que pela la urgencia y esta urgencia necesita de un cuerpo opositor múltiple en sus orígenes, pero unicolor en su objetivo de salvar la República y la democracia.

No alcanza con votar en forma dispersa en el Congreso, porque aumenta la insignificancia de cualquier alternativa.

Los protagonistas de la oposición -repito: con excepciones- se limitan a maquillajes, negociaciones de corto vuelo, respuestas confusas a la agenda oficial, ambiciones personales, y conceptos nublados por su arcaísmo y miopía.

En otras palabras, reproducen ad náuseam el modelo populista (oportunista) que mantiene encadenada en un pantano la extraordinaria potencialidad argentina.

No se han dado cuenta de que China, por ejemplo, desde que se atrevió a dejar en la historia el fósil modelo colectivista de Mao, ¡aumentó 45 veces su PBI!

Por lo tanto, urge liberarnos de las cadenas populistas que enriquecen a unos pocos y hunden en un pozo sin fondo a toda la nación.

Una oposición ciega e irresponsable
Por Marcos Aguinis, LA NACION, hacer clic aquí.

¿El Socialismo de Mercado del PCCh como “salvación” de la Republica, con Mayúscula, y la democracia, con minúscula?

Ojo, más que un lapsus involuntario, es la simple nostalgia por la ausencia del Partido Militar; que vivía salvando a la “Republica”, las “Instituciones” y la “Constitución” de la “amenaza” del “populismo autóctono”; esa Contracultura plebeya que empieza con P…

La “tentación” del “atajo” de Plaza de Tian'anmen ya la rechazamos en 1989, y en el 2001; el Peronismo “de Guerra” maduro con la Resistencia Vieja, 1955/70; la Resistencia “ampliada a la pequeña burguesía”, 1970/73; al Proceso, 1976/83.

Por eso nos resulta tan familiar la idea de Insurgencia, ver video de mas abajo.





Sabíamos, y sabemos, que mantener la Democracia con mayúsculas; incluyendo las “malditas” elecciones, es mucho más arduo y complejo que la “Militarización del Orden Social”; que tan “atractivo”  les resulta a los No Peronistas cuando las papas queman.

Creemos que la dialéctica múltiple, al estilo de Battlestar Galáctica Re-imaginada (hacer clic aquí), es mas “productiva socialmente” que el “Orden Jerárquicamente  Regimentado” de las Tradiciones Liberales y Marxistas

Que ven el “Juego de Poder” como si fuera un Tablero de Ajedrez, o su evolución tecnológica, el PayStation.

Preferimos, en cambio, realizar nuestra propia praxis con las reglas de los Naipes; o su versión actual de Juegos de Rol, que por definición implica jugadores múltiples; ver video de abajo.  




Donde Alianzas, Traiciones, y Renegociaciones; incluyendo la “Infiltración”, no nos escandalizan; al fin y al cabo solo somos seres humanos que pretenden sobrevivir al “Por Venir”, no semidioses impolutos desde lo Ético y Moral, propietarios de la “Verdad” filosófica.

Resumiendo, hay lugar para todos en el Juego sin Fin.