Afiliado al
radicalismo desde 1964, Grondona entendió con cuanto gobierno coexistió ser
"moderado" para poder seguir ejerciendo su poder.
Llegaron a
ofrecerle, por sus vínculos con el radicalismo, una propuesta para ser
intendente de Avellaneda.
"A la
AFA no la cambio por nada", dijo en su momento el ex presidente de AFA.
Sus
vínculos no se dieron sólo en la política nacional, sino dentro del mundo del
fútbol.
A fines de
los 80 consiguió un puesto en FIFA que mantuvo hasta el día de hoy: fue
vicepresidente de la máxima organización del fútbol mundial.
Hoy, a sus
82 años, falleció en un sanatorio de Capital Federal.