“Offshore”,
en la jerga mear fuera del tarro, también es una “pasión” de los polarizados
cuando “depositan” sus opiniones.
Tardar 6
meses, y gracias a las encuestas, en asumir el corte de clase de los
posicionamientos políticos de las elecciones de 2015; significa que no se
hicieron los deberes posteriores.
¿Por qué mierda
se perdió?
A diferencia
del autodenominado “campo nacional y popular”, tan adictos al Paco ideológico
como los grouppies de Cambiemos y Mauricio Presidente, la materia gris del
Establishment no percibe un horizonte “rosa” de 100 años de Republica.
Y. a pesar
de las “promesas” de la ultimas décadas, asumen las doble R en el mediado plazo.
Rapiñat y
Rajarse.
Todas las
encuestas basadas en los “índices de confianza del consumidor”; que no es mas
que preguntar como lo ven a “Alais”, aka “remontada” del segundo trimestre, dan
literalmente para el culo.
Mas que la “sofisticación”
de la “Comunicación posmo”, la cuestión esta en las simplificaciones “clásicas”
de los populismos de los siglos XIX y
XX.
Pueblo o
Plutocracia.
Patria u
Oligarquia.
La “proletarización
a marcha forzada” del “ajuste reordenador” de los equilibrios Macro”; es lo que
lleva a un Gurka como Edu Feiman a saltarle a la yugular a Aranguren.
Lo que se
llama efemisticamente “falta de cintura política”, es reconocido por la propia
tropa de los Republicanos como “Provocaciones” que justifique bardo de las
Clases Populares.
Las mismas, que por ahora, han decidido por el “modo
activista social”.
Ya que a
pesar del sentido común de la Burguesia Ilustrada, es mucho mas “Institucionalista”
que los venerados Suctores Medios.
Que, históricamente
y no solo en la Arhemntina, suelen ser la carne de cañon de los fascismos y
reacciones.
¡Otra encuesta!
Comparar con la columna de hace una semana.
No es que Macri esté débil en la
opinión pública.
Distintas encuestas dan cuenta de que su
gestión goza aún de un amplio respaldo de la sociedad.
Pero bastó que su imagen favorable
cayera unos pocos puntos y que se insinuara cierto mal humor social frente a un
ajuste de tarifas en los servicios públicos no muy bien explicado para que la
oposición se animara a desafiar al Gobierno.
Según un reciente sondeo de la
consultora Management & Fit, el nivel de aprobación del gobierno de Macri
descendió del 50,7% en marzo al 45,8% en abril.
Entretanto, la confianza del
consumidor cayó también este mes 10,3 puntos respecto de marzo, de acuerdo con
el índice de la Universidad Di Tella.
Abril marcará, según
fuentes del propio gobierno nacional consultadas por LA NACION, un récord
cuando se conozca el aumento del costo de vida, que podría redondear el 6 por
ciento, como consecuencia del impacto de los incrementos en el transporte
público de pasajeros y los servicios eléctricos, además de las correcciones en
los precios de los alimentos.