viernes, 21 de agosto de 2009

ÍNDICE DE OCUPABILIDAD DEL MINISTERIO DE TRABAJO

Cuatro de cada diez parados tienen pocas posibilidades
de salir del desempleo

El 13,2% albergan muy pocas opciones de encontrar nuevo trabajo

Mujeres, inmigrantes, entre los que más dificultades hallan

Los parados se enfrentan cada día a la dura tarea de encontrar un nuevo trabajo, sin embargo, no todos tienen las mismas probabilidades de lograr su objetivo. Más de 1,4 millones de personas, el 39,5% del total de los 3,5 millones de desempleados registrados en España en julio, tienen pocas o muy pocas posibilidades estadísticas de encontrar un empleo.

Según el índice de ocupabilidad de los parados registrados que elabora el ministerio de Trabajo, el 13,2% de los desempleados inscritos en el Inem (467.415) tenían muy pocas opciones de hacerse con un puesto de trabajo, mientras que para el 26,35% (933.315), las probabilidades eran bajas.

La amplitud del ámbito geográfico de búsqueda y la antigüedad de la demanda determinan las posibilidades de dejar el desempleo. Atendiendo a la confluencia de estos factores, el índice también indica que el 37,5% de los parados (1.328.202) presentan un nivel de ocupabiliadad medio, mientras que el 23% (815.163) son "altamente ocupables".

En general, las posibilidades de salir del paro son menores para las mujeres, los inmigrantes, los trabajadores de mayor edad, los que tienen menor nivel de estudios, los demandantes de más antigüedad y los perceptores de prestaciones, especialmente los que cobran ayudas asistenciales, subsidios para mayores de 52 años y la Renta Activa de Inserción (RAI).

Por otro lado, más de la mitad de los desempleados del colectivo sin empleo anterior tienen pocas o muy pocas opciones de encontrar un nuevo empleo. El resto de los sectores presenta mejores cifras, incluido el 'ladrillo'.

Mujeres y mayores de 45 años

Por sexos, el 36,2% de los 1,7 millones de parados varones registrados en julio en las oficinas del Inem tenían pocas o muy pocas posibilidades de encontrar un empleo, porcentaje que repunta hasta el 42,8% en el caso de lasmujeres, colectivo que concentra al 50,07% de los desempleados a nivel nacional.

Por edades, el grado de ocupabilidad es bajo o muy bajo entre el 57,3% de los desempleados mayores de 45 años, cifra que desciende hasta el 31,1% en la franja de 25 a 45 años y hasta el 26,5% en el caso de los menores de 25 años.

Por sectores, sólo el 13,8% de los parados que forman parte del colectivo sin empleo anterior tienen muchas posibilidades de salir del desempleo, porcentaje que alcanza el 21,1% en el caso de la industria, el 22,3% en la agricultura, el 23,1% en la construcción y el 24,6% en los servicios.

Por comunidades autónomas, Navarra sigue presentando el porcentaje más alto de desempleados que tienen una alta ocupabilidad (42,5%), mientras que Ceuta, Aragón, Cataluña, Murcia y La Rioja se encuentran en el extremo opuesto, porque apenas uno de cada diez parados albergan muchas posibilidades de abandonar el paro.

http://www.elmundo.es/mundodinero/2009/08/21/economia/1250853365.html

Por favor, no se enojen por la chicana; entiendan que era irresistible, verla picando con el arco desguarnecido.

Un abrazo.

Crisis antipolítica en el Modelo Suramericano.

Los envejecidos votantes de Chile

El Gobierno intenta atraer a las urnas a los menores de 30 años, que suman menos del 8% del padrón electoral

Con el lema Yo tengo poder, yo voto, una campaña publicitaria del Gobierno desplegada en televisión, radios y avisos en las vías públicas busca aumentar la inscripción de los menores de 30 años en el padrón electoral para los comicios presidenciales y parlamentarios del próximo 13 de diciembre. Los candidatos también despliegan esfuerzos propios para atraer a los jóvenes, cuya participación electoral ha caído desde representar un 35% del padrón electoral en el plebiscito de 1988, en el que el triunfo del no impidió que el dictador Augusto Pinochet se perpetuara en el poder, hasta menos de un 8% en los comicios municipales de 2008.

El poder electoral, que al restablecimiento de la democracia en 1990 estaba en manos de los menores de 35 años, hoy descansa entre quienes tienen 35 y 55. En la práctica, son casi los mismos votantes de hace 20 años, pero que ahora ya tienen sus primeras canas.

Un analista político ha descrito el fenómeno como el avance progresivo hacia una "democracia gerontocrática". Para el jefe de estudios de la empresa de estudios de mercado y opinión pública Adimark, Roberto Izikson, "el padrón electoral se ha envejecido y los que toman decisiones son los mismos que en 1990, pero más viejos". La situación se traduce en que será este segmento el decisivo en las elecciones y a ellos se dirigirán especialmente las campañas.

A diferencia de otros países, en Chile el voto es obligatorio, pero hay que estar inscrito previamente en los registros del Servicio Electoral. Para tener derecho a votar es necesario ser mayor de 18 años e inscribirse en una oficina del Servicio Electoral en la comuna de residencia.

El trámite, que cada vez realizan menos personas, debe efectuarse en oficinas públicas que sólo abren de martes a sábado. Las inscripciones para tener derecho a voto en los comicios de diciembre estarán abiertas hasta el 13 de septiembre, y el plazo es escaso para revertir la tendencia. Se trata de "un sistema arcaico", sostiene Izikson.

Pero el derecho a voto, que tampoco es universal, porque no se ha ampliado a los chilenos que residen en el exterior por el rechazo de la derecha, se transforma para los inscritos en una obligación vitalicia y bajo amenaza de multa si no acuden a votar.

Una reforma constitucional transformó en marzo la inscripción en automática e hizo voluntario el voto, pero sólo tendrá efecto a partir de las elecciones municipales de 2012.

Con la inscripción automática, por el sólo hecho de tener 18 años, en 2012 se incorporarán al padrón más de tres millones de personas, un tercio de los votantes. El nuevo caudal de votos tornará más impredecible el resultado de los comicios y algunos temen que pueda subir la abstención por la pérdida de la obligatoriedad del sufragio.

La apatía es mayor entre los más jóvenes. En 1988, quienes tenían entre 18 y 24 años representaban el 20% del total del padrón electoral, pero hoy son sólo el 3%. Algunos lo atribuyen al desinterés de los jóvenes por la política, un fenómeno mundial sólo roto por la elección de Barack Obama en Estados Unidos, y que crece en la medida que los resultados de los comicios son menos traumáticos para las sociedades. Para otros, la responsabilidad en el caso de Chile es de un sistema electoral restrictivo, concebido en dictadura y que todavía no ha sido reformado a fondo.

Según las encuestas, el voto de los jóvenes tiende a favorecer en primer lugar al candidato opositor Sebastián Piñera, que representa a la derecha, y en segundo término a Marco Enríquez-Ominami, un diputado que renunció al Partido Socialista y se presentó como independiente después de que no le permitieran competir en las primarias de la coalición gobernante. En cambio, el ex presidente Eduardo Frei, el abanderado de la Concertación, tiene más apoyo entre los mayores de 55 años.

Enríquez-Ominami, que asegura haber conseguido más de las 36.000 firmas necesarias para presentarse como candidato independiente a la presidencia, acompañó a un grupo de jóvenes a inscribirse en la oficina central del Servicio Electoral el pasado lunes. Pero las oficinas estaban cerradas. "En esta elección presidencial como en ninguna otra hay una fuerza creativa, productiva, pensante, que va a quedar fuera del sistema electoral", criticó.

Las campañas que han desarrollado los partidarios de los candidatos para inscribir jóvenes tampoco han dado resultados. Uno de los hijos de Piñera ha recorrido el país en un autobús para incentivar a los menores de 24 años con el lema Mójate por Chile. El Servicio Electoral y el estatal Instituto de la Juventud han hecho un llamamiento a los estudiantes para que se inscriban hoy en una jornada especial.

Los sondeos coinciden en situar a Piñera primero en la elección, seguido por Frei y Enríquez-Ominami en una competencia reñida, en la que el primero tiene una leve ventaja. El apoyo a Piñera y Frei aparece estancado o con leves variaciones, mientras Enríquez-Ominami ha crecido hasta quedar muy cerca de Frei.

Una encuesta de IPSOS publicada el miércoles muestra por primera vez que en una eventual segunda vuelta contra Piñera, Enríquez-Ominami lograría un 40,3% contra un 43,6% de aquél, un resultado mejor al que obtendría Frei (38,1%) frente al candidato de la derecha (45,5%).

http://www.elpais.com/articulo/internacional/envejecidos/votantes/Chile/elpepuint/20090821elpepuint_3/Tes

Mi opinión, sobre el tema electoral y la situación social chilena, ya la exprese muchas veces.

Pero seria interesante alguna explicación, lógica, sobre la falta de entusiasmo político y movilización ciudadana.

Errores, calenturas, impotencias, y otras delicias de la vida política.


“Nos abrocharon,…nos hicieron quedar como boludos,…hay que salvar la cara”

¿Conceptos del campo oficialista?, no, fue en las tiendas del ACyS; que descubrieron tardíamente, que TODOS los esfuerzos del seguidísimo eran inútiles frente a los mañosos del pejotismo.

A ver si me explico mejor, por si no se entiende bien.

Darle aire, en el Interior de la PBA, al Colorado; es horadar la trabajosa reconstrucción de la UCRPBA, y por lo tanto limitar las posibilidades de los candidatos nacionales boina blanca.

Si fue un error no forzado, una negociación para darle aire al PJ Interior, una “picardía” de Narváez, o un cebo para desarticular el desarrollo radical; es lo de menos, lo que importa es el resultado.

“Los Radicales hablan, los Peronistas hacen”, superstición burguesa de los últimos 60 años, quedaría reforzada.

Los votos peronistas, tan deseados desde el voto en blanco del 57, dejan paso a la estructura de ejecución; la del 89 y 2001.

“Solo los peronistas pueden gobernar la Argentina”, otra superstición, esta vez basada en el dato de las impotencias organizativas, condenaría a cualquier candidato a ejecutivo que se presentara sin el bombo y la marcha.

Cobos a la Nación, de Narváez a la PBA; frente a cualquier otro binomio P, seria un golpe mortal a las aspiraciones de “parecer ser” una fuerza de centro izquierda; aunque se ganara.

Para colmo, con el fantasma de Tachuela, rondando en los pasillos de palacio.

Para el peronismo disidente, del resto del país; también es un dolor de huevos, pero en menor medida que los radicales.

Quizás eso explique el brote del Lole.

Traduzco a porteño; si pudimos darle chapa a de Narváez, “a cambio de su silencio”, no hay problema en sentarse a negociar con quien quiera hacerlo; siempre y cuando no vengan con las boludeces a las que son tan afectos los republicanos.

Porque, en la vida real; los resultados son mas importantes que los principios de quienes ejecutan.

Los Derechos Sociales, el Estado de Bienestar y el voto Universal no se establecieron primero en el Reino Unido; como creía Marx que era inevitable, sino el la Alemania de los Junkers; gracias a las roscas politiqueras de Fernando L y Otto B.

“Las premisas del socialismo y las tareas de la socialdemocracia”, 1899 de Bernstein, aun sigue siendo el reformismo máximo posible para la Internacional Socialista.

Por ultimo, ¿veto o no veto?; es la esperanza de los que viven del error forzado no ajeno.

Si hay veto pueden alardear de la “incontinencia dictatorial”, y coagular “la fuga de vencedores”.

Si no lo hay, se aceleraría el aislamiento de los ultras; porque quienes tienen esperanza de gobernar no les conviene romper todo esperando el Apocalipsis.

Por eso necesitan salir a torear, que se duplique la apuesta; “Cuanto peor, mejor”.

El setentismo no es patrimonio exclusivo de la Administración Nacional, y como le dijo Jorge Giacobbe a Jorge Asís.

“Si existieran partidos políticos en serio, nosotros seriamos superfluos”

Pero claro, como lo “viejo” se resiste a morir, y lo “nuevo” nunca termina de arrancar.


La imagen la copie de aquí.