El Panóptico de auscultación sociopolítico “es
un emprendimiento conjunto entre Ernesto Calvo, Julia Pomares, María Page,
Manuel Aristarán y Andy Tow para el monitoreo y análisis de encuestas de
elecciones nacionales y provinciales de 2015 publicadas en medios digitales”
Como herramienta de análisis es espectacularmente poderosa, aunque
aun esta “inmadura”
Cuando logre “disciplinar”, metodológicamente hablando, a
las empresas generadoras de encuestas; “exponiendo” a la mirada inquisitorial
de la Academia y los Estados Mayores de los partidos sus resultados.
Tendremos un cambio copernicano que pasara a retiro efectivo
a la Secta Word, que en base a sus prejuicios más que a las evidencias
contrastables, ha campeado dictatoríamente en las estrategias y relatos políticos
del último tercio de siglo.
Como expresaba Sergio Berensztein el 25/07/2015
Ocurre sin embargo, que las sociedades son muy complejas.
Siempre lo fueron, pero en esta etapa post moderna las identidades y
las preferencias de los ciudadanos se han vuelto más enrevesadas, cambiantes y
hasta volátiles de los que nuestros rígidos marcos analíticos nos permiten
registrar.
Por formación, influencias teóricas, costumbre o mero capricho nos
empeñamos a menudo en simplificar exageradamente escenarios confusos, a los que
para peor intentamos comprender a partir de información por lo menos
insuficiente, cuando no cuestionable o inadecuada.
Si tomamos los resultados que publico Andy Toe en Twitter; Scioli
38%, Macri 30% Massa 16%
Para los “cuenta porotos”, devotos seguidores del místico Fray
Luca Pacioli, Scioli sale primero en la General, pero pierde frente a Massa en
la PBA.
Para comprender el razonamiento de Excel se debe tomar en consideración
los datos indiscutibles e hipótesis verosímiles.
a) Lo indiscutible.
1/ El sistema electoral argentino SOLO considera el llamado
voto positivo, poniendo en valor el presentismo electoral y los votos en blanco
y nulos.
Así se puede dar el caso que el distrito A, con mayor padrón
electoral que el distrito B, pero con mayor tasa de ausentismo, termine
teniendo menor peso porcentual que el segundo.
Distrito A, padrón de 1.000.000, presentismo 72%, sufragios
emitidos 720.000.
Distrito B, padrón de 900.000, presentismo de 80%, sufragios
emitidos 720.000
Cuestión que termina por agravarse por los blancos y nulos.
Distrito A, sufragios emitidos 720.000, blancos y nulos 10%,
votos positivos 648.000
Distrito B, sufragios emitidos 720.000, blancos y nulos 5%,
votos positivos 684.000.
2/ La PBA representa 37.01% del padrón nacional de 32.064.323;
pero gracias a su alto presentismo y bajo porcentaje de voto en blanco y nulo,
su participación en el voto positivo nacional se incrementa entre el 40% y 42%.
Sucediendo a la inversa con los 4 distritos que la siguen en
participación del padrón nacional; Córdoba 8.68%, Santa Fe 8.36%, CABA 7.95%,
Mendoza 4.25%.
3/ Al contrario del resto de las democracias, con voto
obligatorio u optativo, donde los Sectores sociales Altos y Medios sufragan en
mayor porcentaje que los Sectores populares o Bajos.
En nuestro país son estos últimos quienes con mayor
entusiasmo no solo sufragan, sino que lo hacen con votos positivos.
Si la elección del 2001, con sus records de ausentismo y
votos blancos y nulos, fuera estratificada por clase social; veríamos que la NO
participación (501) y el voto NO positivo (feta de salame) tienen un impacto
desmesurado en los Sectores Medios y Altos.
Mientras los Sectores Populares o Bajos prefirieron el voto
castigo positivo en una notable mayoría.
4/ A pesar de los prejuicios arraigados; ni el clientelismo,
ni el fraude, ni la condición de oficialismo, tienen el “impacto” electoral “sospechado”.
Investigaciones de campo financiadas y monitoreadas por
usinas del exterior, estatales y paraestatales, consideran a los dos primeros
(Clientelismo y fraude) marginales; mientras que el tercero (Incumbent) no
tiene desviaciones en comparación a las Democracias del Atlántico Norte.
“Y creo que podría ganar”.
b) Hipótesis verosímiles.
Sergio Massa ha obtenido resultados decepcionantes en las
provinciales y municipales de este año, a excepción de Salta Capital.
Mientras que Macri, mejor posicionado por su relación con
Cambiemos, por su “propia tropa” obtuvo resultados mediocres, con victorias
ajustadas y derrotas desalentadoras.
Lo que nos permite aventurar, verosilmente, que Macri sin la
UCR “tiene” mucho más que Massa, más allá
del Arroyo del Medio.
Lo que implicaría que el +ismo es más una “fuerza
territorial”, PBA, que “nacional”.
En la última, siguiendo el análisis de territorializaciòn
2013 de Andy Tow; es dominante en la 1ª Sección, lleva una leve ventaja al FPV
en el Interior de la PBA, mientras que este último administra una ventaja sobre
la Renovación en la 3º Sección.
Si suponemos que el 16% que señala la Borra fuera similar al
resultado de las PASO entre de la Sota y Massa (4 + 12)
Nos encontraríamos con la paradoja que el 75% de los votos “nacionales”
de STM sería un piso del 30% del electorado de la PBA.
Lo que implicaría, si se mantienen los guarismos sostenidos por
las encuestas que:
O Scioli sale segundo.
O Macri, Stolbizer y Altamira tienen mucho menos de lo que
se les otorga en la PBA; un 30% o menos, en lugar de un 40% o más.
Si recordamos que en las generales de 2011 de la PBA los
guarismos fueron:
Binner 14,93% + Alfonsín 9,69% + Carrió 1,74% = 23.36%
Rodríguez Saa 7,33 % + Duhalde 7,14% = 14.47%
Altamira 2,74%
Seria asumir que los votos logrados por Rodríguez Saa y
Duhalde irían, en las PASO y Generales, a Macri en lugar de de la Sota o el
mismo Massa.
Ídem con los votos de Alfonsín, Macri en lugar de Sanz o
Margarita.
Y no hablemos del 7.80% que logro Binner en las PASO, antes
del “efecto Duhalde”, que no solo lo afecto a él, sino también a Alfonsín.
Si la información de las encuestas permitieran ponderar por
provincia y “zonas”; Secciones electorales bonaerenses; Santa Fe Norte, Santa
Fe Sur y Rosario; Córdoba Capital, Córdoba Norte, y Córdoba Sur; Caba Norte, Sur y Oeste; Entre
Ríos Este, Oeste y Paraná.
Podríamos dilucidar si estamos frente a una correlación
espuria, un problema metodológico, o una paradoja política con implicancias
estructurales.
Por primera vez, desde 1922, no se cumpliría el imperativo
bonaerense de Andy Tow; seria el costado académico.
Pero en el lado político estaríamos frente a un potencial
conflicto que heriría de muerte la reelección esperable de DOS en 2019, de mínima.
O pondría en cuestión la victoria en 1º vuelta del binomio
del FPV, de máxima.
La ausencia, a los gritos, de encuestas publicadas a 15 días
de las PASO; mas los “sinceramientos” de Berensztein, López, Duran Barba et al;
es lo más parecido a una confirmación sobre las fallas estructurales de las
encuestas.
Lo que termina por falsear las estrategias de Campaña.