Mientras se comen las uñas en los Despachos, por la
incertidumbre generada por consumo de galletitas Opera vitaminizadas.
En la calle las “intuiciones” se calculan por el volumen de
reparto y la intensidad del uso de guillotinas.
Unos se preocupan por el voto en blanco, otros por la
incidencia del “corte”.
Pero omiten lo más importante, la decapitación impersonal de
una forma de hacer política, ya nada será como en las últimas décadas.
Como le gusta decir a Abel; los que sobrevivan, al recuento,
podrán contarlo.
PD Consejo de veterano, aprovechar a dormir la siesta, las
tendencias pueden llegar muy de madrugada.
Aunque los chillidos serán los protagonistas del “Horario
estelar”.
