Estamos gobernados por las fuerzas
demagógicas y corporativas de la
Provincia de Buenos Aires.
Éstas representan el anticapitalismo
y la teoría de la conspiración.
Los gobiernos provinciales, hoy sin
poder, tienen mayoritariamente, una visión mucho más moderna de la política y
la economía.
¡Pobre Sarmiento si viera la Barbarie representada por
la Provincia
de Buenos Aires y la
Civilización encarnada en los caudillos del interior!
El derrumbe del 2001 permitió el
surgimiento de un Leviatán, con perdón del Leviatán.
Yo creo que en el 2001 la sociedad se
volvió loca, salió de su casa a llevarse a todos puestos.
Yo iba a cenar con políticos que te citaban a
las dos de la mañana para comer entre brasileños.
Había ministros de Menem que le pedían el avión
a Eurnekian para ir a San Pablo y viajar a Europa entre brasileños.
Ese es el estado que explica lo que vino
después.
La dirigencia argentina –donde pongo
a los políticos, los empresarios, los medios, los sindicalistas, los líderes
religiosos, a todos–, atemorizada por ese fenómeno, decidió darle a la gente
una fiesta de consumo por diez años.
Y al que nos dio esa fiesta lo consagramos
Edipo Rey.
Eso es lo que pasó en Argentina.
Esa fiesta se terminó.
Y no sabemos hacia dónde va esto.”
Al final ocurrió lo que hacía tiempo veníamos
anunciando: Domingo Cavallo y el Radicalismo destruyeron el endeble tejido
socioeconómico de la
Argentina.
Lo lamentable es que a causa del
colapso no se impusieron los mejores, sino los más organizados: hay que
pellizcarse muy fuerte para entender que nos está gobernando una alianza entre
la izquierda Alfonsinista y el corporativismo Duhaldista.
Ambos sectores representan la
antítesis política de lo que la población reclama impotente.
…………
Hay quienes piensan que ya tocamos
fondo y por ende las cosas tienen que mejorar.
No se equivoquen, la Alianza Bonaerense
tiene aún mucho camino por andar.
La lógica indica que volverá a
instaurar el sistema institucional que durante décadas postergó la modernización
de la Argentina
y que colapsó en 1989.
Aún falta nacionalizar lo que se privatizó,
control férreo de cambios con cambios múltiples, sistema bancario estatal
únicamente, crédito dirigido desde el BCRA, cerrar aún más la economía,
retenciones a la exportación y control de precios y salarios.
En todo esto la Alianza Bonaerense
cuenta con el apoyo de los líderes sindicales y de la Unión Industrial
encarnada en el Grupo Productivo.
La Alianza Bonaerense tiene mucho poder de movilización, algo que les faltó
a De la Rua y
Rodríguez Saa.
Están para mantener la estructura de ciertos
derechos adquiridos, mayormente los de la corporación política, los de los
empresarios prebendarios y los de los líderes sindicales.
Los enormes intereses en juego hacen
que los favorecidos por esta vuelta al pasado sean "a prueba de
cacerolas".
Como ya dijo días pasados un
experimentado político de este grupo cuando los pasajeros del vuelo protestaron
por su presencia: "si no les gusta tómense otro avión".
El 27 de octubre pasaron cuatro
cosas.
La primera es que se quiebra el
oficialismo en la provincia de Buenos Aires, algo estratégico porque el PJ es
una de las vigas maestras del poder que soñó Néstor.
Segundo, es muy importante lo que sucede en el
norte y en el sur del país: el retraso cambiario y la crisis energética hacen
que los gobernadores aliados pierdan.
Por lo tanto, hay una quita de consenso a la
política económica de quienes la sostenían, no de quienes la impugnaban.
El tercer dato relevante es que podría haber
una reposición de un sujeto no peronista, sobre la base de lo que es el fósil
del viejo radicalismo, en lugares como Jujuy, La Rioja, Tucumán, Mendoza y
Capital.
Empezaría a haber algo que desde mi punto de
vista es valioso: que haya equilibrio, que haya mercado.
Alternativas competitivas.
Como eso en la provincia de Buenos
Aires no sucede, porque el radicalismo es una línea interna del peronismo desde
Cafiero para acá –una de las razones de que se haya expandido el narcotráfico,
la pauperización, la desindustrialización, en una provincia plagada de lacras
sin debate político– se produce el desdoblamiento del peronismo, que a mi
juicio es fraudulento.
La ficción consentida de que ahora
viene la renovación del kirchnerismo con Alberto Fernández, solo la pueden
creer los que escriben “cristinismo”.
………..
Es que en el 2001 pasan dos cosas cruciales.
Una, colapsó el radicalismo.
En ningún proceso histórico es gratis que
desaparezca un actor que sirvió como instrumento de intervención de los
sectores medios en la vida pública por más de 100 años.
Nosotros hemos mirado esta década a la luz de
la emergencia de los Kirchner.
Yo la miro a la luz de la desaparición del
radicalismo.
Me explica mucho más y me explica a los
Kirchner.
Cuando los historiadores estudien el
2001, va a ser una fecha como 1852 la caída de Rosas, 1955 el golpe de Estado…
El otro dato muy importante es que,
por primera vez desde 1880, toma el poder de la Nación la provincia de
Buenos Aires.
Este país había sido organizado por
Roca como una alianza de provincias del interior contra Buenos Aires.
Para eso se federaliza la Capital, para eso se
federaliza la Aduana.
El duhaldismo –y el kirchnerismo en
esto es duhaldismo, no ha dejado de serlo hasta ahora, y sigue con Massa y
sigue con Scioli–es la provincia de Buenos Aires, que da un golpe de Estado
para apropiarse del poder nacional y llevar adelante un programa en contra del
resto del país.
Para extraer recursos de los sectores más
dinámicos de la economía y volcarlos como subsidio en el conurbano.
Para que yo pueda viajar –presumiblemente
muriéndome en el camino– ida y vuelta a La Plata por un peso.
………..
Es el gran desafío de Massa.
El peronismo, cuando no hay sistema,
funciona en sí mismo como un sistema.
Massa sacó 650 mil votos
antikirchneristas más en octubre que en agosto.
Yo me imagino una señora leyendo La Nación en Lomas de San
Isidro y diciendo: “¡qué lindos chicos los Massa, que se llevaron a Cristina!
¿De dónde son?”.
Peronistas, vieja.
“¡¿Cómo?!”
Sí, están con Barrionuevo, con
Lavagna, con Alberto Fernández.
“Ah no, me gusta más Cobos”.
O, “me gusta más Macri”.
Ahora, ¿Massa tiene capacidad para
producir los proyectos, las fantasías de transparencia democrática,
reconstrucción institucional que declaman los sectores medios?
¿O cuando yo como esa ensalada digo:
che, a esto le falta Carrió?
El fantasma
que aterroriza a Europa, las contramedidas en España, como antídoto piloto
contra la “argentinización” de los contenciosos sociales.
Si protestas, pagas
En el transcurso de los últimos cinco años, las quejas
contra las medidas de austeridad y un sentido de la injusticia económica han
hecho que la protesta tenaz, perturbadora pero pacífica se convirtiese en una
parte de la vida de España.
Los trepidantes movimientos sociales del país han
levantado acampadas en las plazas de las ciudades, movilizado manifestaciones
masivas, organizado escraches delante de los domicilios de los políticos y
paralizado centenares de desahucios de viviendas embargadas.
Es como si el Gobierno español quisiese paralizar todo
esto.
El proyecto de Ley sobre seguridad ciudadana que será
pronto sometido al parlamento es un batiburrillo de medidas, con multas para
todo desde la torpeza (obstrucción indebida del tránsito peatonal que cree
disturbios innecesarios) hasta el olvido (pérdida del documento de identidad
tres veces en un periodo de cinco años).
Multa a las persona que se cuelgan de un edificio
público, por beber en público, e impedir el tráfico de peatones o vehículos
jugando partidos en el espacio público.
Pero resulta que el objetivo real del proyecto de ley
es el activismo.
Tildado rápidamente de ley antiprotesta, el proyecto
de ley ha desatado una tormenta de críticas, protestas y la escalada no
autorizada de un edificio madrileño por activistas de Greenpeace para colgar
una enorme pancarta de protesta.
Es asombroso observar que España, en el propio seno de
la Unión Europea,
se está moviendo para disuadir y sancionar la protesta pública mientras decenas
de miles de personas ocupan las calles de Ucrania, corriendo el peligro de ser
detenidos o de ser aporreados por la policía para pedir lazos más estrechos con
Europa.
España no debería crear un mal ejemplo limitando estas
libertades fundamentales.
El Gobierno del presidente Rajoy quiere imponer multas
de hasta 30.000 euros por planificar o participar en protestas espontáneas
frente a los parlamentos nacionales o autonómicos, y por insultar a las
instituciones, símbolos, o himnos de España o de cualquiera de sus Comunidades
Autónomas "mediante cualquier medio" (¡atención, usuarios de
Twitter!).
La obstrucción a las autoridades que llevan a cabo
órdenes administrativas o judiciales, por ejemplo un desahucio, podría dar pie
a la imposición de la misma severa multa.
Todo ello es definido como infracciones graves, pero
si se cometen tres infracciones de esta índole en dos años, se ha cometido una
infracción muy grave, que puede ser sancionada con una multa de hasta la
cantidad astronómica de 600.000 euros.
El proyecto de ley establece la creación de un
registro del Ministerio del Interior con el nombre de aquellas personas que han
sido multadas por infringir la ley.
En particular, el proyecto de ley responsabiliza a los
líderes de facto, a los convocantes y a los no mejor definidos "inspiradores"
de las protestas, por los actos de los participantes.
El proyecto de ley establece también multas de hasta
1.000 euros por insultar a las fuerzas del orden durante una manifestación o
por distribuir imágenes que ofendan su honor, así como por insultar o faltar al
respecto, por cualquier medio, a los representantes e instituciones públicas,
cuando dichas acciones no están sujetas a acciones penales.
Todo este conjunto de medidas permitiría a las
autoridades obviar a los tribunales en la sanción de la disidencia.
El proyecto de ley se inscribe en una tendencia
preocupante: las estadísticas del Ministerio del Interior muestran que la
aplicación de multas administrativas a los que protestan aumentó en un 350% en
2012 respecto al año anterior, aunque el número de manifestaciones ha
disminuido.
Afortunadamente, los tribunales han respaldado el
derecho a reunirse pacíficamente.
En mayo, un tribunal de Madrid desestimó una denuncia
contra 18 personas por amenazas y acoso en una manifestación espontánea frente
al domicilio de la vicepresidenta del Gobierno, aduciendo que no había habido
amenaza al orden público o infracción contra su derecho a la privacidad.
En julio, otro tribunal de Madrid dictó sentencia
argumentando que multar a una persona que participe en una manifestación
espontánea y no violenta violaba el derecho de reunión pacífica.
La
Constitución española garantiza una sólida protección al derecho
de reunión, afirmando de forma explícita que no se requiere una autorización
previa.
Los organizadores deben notificar previamente a las
autoridades, pero las manifestaciones tan sólo pueden ser prohibidas si existen
temores bien fundados de peligro para personas o bienes.
De conformidad con la jurisprudencia del Tribunal
Europeo de Derechos Humanos, el Tribunal Constitucional español ha precisado
que puede tolerarse un cierto grado de disturbios porque "en una sociedad
democrática, el espacio público es un área no sólo de circulación, sino también
de participación".
El amigo y
compañero Charly Boyle, hacer
clic aquí, también trato la diferencia entre el “Orden Publico”, “hágase
cargo Comisario”; que en España refuerzan eludiendo la “vía judicial”, para
aplicar la “vía administrativa”.
Y “Doctrina
del Orden político negociado”; vigente desde el 2002.
En cuanto a
la cuestión “Interior contra los porteños”, sea la “Ciudad” (CBA) o la “Campaña”
(PBA = 1ª y 3ª + resto de las Secciones); ya lo planteaba Rodríguez del CEMA en
2002.
Y sigue “vigente”
con Pagni haciendo punta, “arrastrado” en su estela al Pan-Republicanismo, de
Derechas pero también de Izquierdas.
No es
casual que el “calvo” columnista, discípulo confeso de Aricó, haya tomado la posta de Claudio Escribano.
El entrevistado se
define como liberal y dice haberse formado como periodista en la “guerrilla de
derecha” que fue Ámbito Financiero en los 90.
Pero también cuenta
que durante el alfonsinismo era muy amigo de José María “Pancho” Aricó, el
intelectual gramsciano que fundó el Club de Cultura Socialista junto a Juan
Carlos Portantiero.
En esos años, en Mar
del Plata, Pagni vendía la revista Ciudad Futura.
“Pancho Aricó decía
que son las formas emocionales de estar instalado las que definen tu
subjetividad política, y las ideologías son después enormes coartadas.”
La “Circunstancia”
de Pagni, en clave Ortegiana, son SUS “suscriptores”; que no casualmente se
superponen, entre otros, con el CEMA.
O sea, se
asumen como los Titulares del Poder, el Establishment.
Y el “obstáculo”
mas “peligroso” para sus Intereses permanentes, mas allá de los “personalismos”,
circunstanciales en términos históricos.
Es lo que
Lasalle llamaba el “Poder Organizado”, el “Sindicato” de Perón, tal cual se mencionaba en la charlas de 1943 a
1945 en la Secretaria
de Trabajo y Previsión.
La Mazorca bonaerense, duhaldismo sin Duhalde,
que es mucho más que un “aparato clientelista” o un simple “Partido de Poder”;
de facto ha sustituido al Partido Militar.
Panzer, T
34, Sherman, eran “herramientas” que transcendían lo Ideológico.
Lo mismo
sucede con el anclaje “social” del peronismo en general, y el pejotismo
bonaerense en particular.
El Síndrome
de Rodolfo Walsh de 1977, que tantas veces señale, se ha repetido en los últimos
30 años cuando TODO lo demás “fracasa”.
Por lo
tanto; no es casual que Menem y los Kirchner, que disponían del “Estado”; la Administración Publica
y sus Cajas, hayan tratado de mantenerlo en “hibernación” cuando estaban de “remontada”.
“Activarlo”,
a contrario sensu hegemónico, implica dejar libres a las “fieras”; que se
amontonan en las “sentinas” sociales y económicas de la Republica
Que se
llevan puestos, a fuerza de votos “propios”, los paniaguados que dependen
exclusivamente de Balcarce 50.
Si el
peronismo ES un populismo, y nadie lo discutiría, hace rato que “supero” la
etapa carismática.
Y su tan
maldecida “adaptabilidad”, no es más que el reconocimiento de su “capacidad de
aprendizaje”.
Más que una
“turba” inorgánica e inestable, un sistema complicado, actúa como un Sistema
Adaptativo Complejo.
O sea; es
una Cultura (¿Religión?) o un Ejército, que no necesita de Profetas o Generales
para “actuar en consecuencia”.
En Junio de
2015 se cumplirán 40 años de la muerte de Perón, y eso implica una “deuda” teórica
para “explicar” por que cornos “sobrevivió” y siguió prosperando.
A nosotros,
los P, nos es suficiente los brulotes del Senex y su Patrono profesional..
“No se trata de seamos
mejores o mas buenos, sino que los otros son peores o mas malos”
"Para que al
oponente se someta a nuestra voluntad, debemos colocarlo en una tesitura más
desventajosa que la que supone el sacrificio que le exigimos.
Las desventajas de tal
posición no tendrán que ser naturalmente transitorias, o al menos no tendrán
que parecerlo, pues de lo contrario el oponente tendería a esperar momentos más
favorables y se mostraría remiso a rendirse."
Clausewitz
sobre la “Aniquilación de la
Voluntad de Lucha del Enemigo”