Qué lindo laboratorio que somos.
Un puchero de big data, focus groups, cientos de miles de
llamadas mensuales, encuestas presenciales, paneles de consumo, auditorías de
redes, tracking las 24 horas, todo para
saber qué tecla tocar para tenerte indignado por huevadas.
Los solarianos, que desde hace un tiempo viven aislados del
resto de la galaxia, reaparecen para salvar a la raza humana de unas criaturas
que quizá no son más que ingeniosas computadoras, aunque poderosas e
implacables: los duglaari.
Pero la solución que solarianos traen a los peligros y
amenazas de la guerra no es un arma secreta ni un insólito plan táctico.
La victoria que ellos prometen se conseguirá mediante una
estrategia simple y terrible: ¡rendición incondicional!
A pesar de ello, la parafernalia de ellos y el desorden
propio, las simulaciones dan ventaja al hecho maldito.