La obra de
la novelista inglesa es la que inspiro el “ambiente recatado y recoleto” del
patriciado oligárquico argentino de fines del siglo XIX hasta la emergencia del
peronismo.
No es casual
que el neo-anti-peronismo de nuestros días suspire por lo que tan bien se
describe en The Remains of the Day de James Ivory.
Las elites
sociales interactuando endogámicamente entre si, sin la molesta intrusión de
las Clase Populares.
Si solo se
tratara de un “empate” entre las “dirigencias” de uno de los partidos de masas más
importantes del mundo, podría seguir la “danza y cortejo habitual”.
Pero, como
aseveran más de uno, los “zombis” no solo asechan en la penumbra”, sino que se
preparan para “sufragar”.
Y ese “sufragio”
incluye la tan temible “renovación de elites propias y ajenas”; con resultados
preñados de incertidumbre.
El
kirchnerismo no peronista, al igual que la renovación +a, califica a mis hipótesis
y aseveraciones como el “peronismo billiken”.
Lo que
agradezco, desde la bibliografía de Lasalle, Toynbee, Gramsci et al.
Ya que yo
solo soy un apologeta improvisado, forzado por las circunstancias.
Pero no se debería
obviar a mentes más lucidas, con herramientas menos toscas, y situaciones más prestigiosas.
El
peronismo, como vehículo de las Clases populares, esta evolucionando; lo que implica
aprendizaje en base al balance de las últimas décadas.
“Cargándose”
en el transito no solo a las propias elites actuales, sino también a las “ajenas”.
Como diría el
amigo Ayj, detrás de Mauricio (Sila) esperan su turno el santiaguero ignoto (Cesar y Augusto).
Para quienes
se queden “colgados”, por falta de “formación básica”, dos lecturas
recomendadas.
La primera es
de estos días, de un notable profesional del análisis Excel.
La otra, de hace
casi una década, por un periodista militante de la Causa Republicana.
Nada nuevo bajo
el Sol, como dijo el Predicador, las Dirigencias pasan y el Pueblo queda.