miércoles, 25 de marzo de 2009

La Aldea Gala; Udine y Débora.


Desde hace un par de años le dedico ½ hora a la semana a “chusmear” la política italiana.

No es solo por las características que podemos compartir con los tanos, tengo la intuición que será uno de los lugares desde donde se intentara llenar el vació ideológico generado por la Bancarrota de la Globalización.

La “política mediática” de Berlusconi, que ya se ha comido a los messinos, y aunque sigue siendo un peligro (Macri o el Colorado); tenemos los anticuerpos como para limitar los daños.

El problema esta en los “particularismos federalistas”, que no es solo Bossi y la Liga del Norte; sino también los seguidores de Pasqual Maragall, Juan José Ibarretxe, Guy Verhofstadt, François Bayrou, Romano Prodi, Francesco Rutelli,  etc.

Objetivamente son el rostro humano de los “satisfechos”, venden con un ropaje de “progresismo liberal” la misma mercadería que Jörg Haider o Le Pen.

Hacer clic aquí, para leer las declaraciones de Pasqual Maragall en su Carta a los Amigos.

Bajo la mascara de la autonomía se niegan los principios básicos de la solidaridad e igualdad; solo comparto si se acepta mi Diktat, ¿les parece conocido?

Es cierto que no son tan brutales como la Derecha pura y dura, ¿pero cual es la diferencia con la “Beneficencia” que proclaman los “Conservadores” para enfrentar la “Justicia Social”?

En ese océano que va desde Barcelona a Viena se encuentra Udine.

Lega Nord, Freiheitliche Partei Österreichs y Slovenska demokratska stranka los rodean, son como la aldea gala de Asterix.

No solo enfrentan a los “romanos”, sino también se le plantan al “Cesar”, Il Berlusca.

Cuando Débora Serracchiani se dirige al Pleno, deja claramente establecido que no solo habla como “territorial” victoriosa, también dieron la cara en el caso Eluana Englaro, hacer clic aquí.  

Mientras las autoridades del Partito Democrático divagaban en las dudas de la “Libertad de Conciencia”.

La convocatoria original a la Militancia, para formar el Partido, fue para construirse como Alternativa de lo “Concreto”; pero terminan como seguidísimo de Antonio Di Pietro y su Italia de los Valores.

Una estructura política que es el reflejo de Berlusconi; personal y personalista, desde la Izquierda.

Desde, por y para la pequeña burguesía; en su eterna lucha ética con la gran burguesía.

Por eso Débora hace sus afirmaciones finales, diferenciándose no solo de los principios de "Popolo della Libertà"; sino también del Progresismo Liberal ético y mediático.

Con su defensa de la Nueva política antipolitica; su nepotismo disfrazado de nuevos rostros; su dependencia de los personajes mediáticos, “fabricados” y “producidos” sin carga ideológica; con su asco y rechazo por cualquier intervención de las bases; su “adicción” por lo impreso, aunque solo lo lean “io, mia nonna, mia zia,”.

Como dijo L’Unita:

“Sono tanti, e sabato nelle parole di un dirigente locale del partito si sono uniti rivolgendo alla dirigenza del partito speranze e richieste.

Che si sappia: quando si parla di «radicamento sul territorio», si parla di loro”

 

Haciendo clic aquí, algunos link interesantes de los temas tocados. 

El Discurso en Italiano, hacer clic aquí.