viernes, 10 de septiembre de 2010

Mauricio, el Administrador; y el Consorcio de la CABA.

Cuántos propietarios saben, por ejemplo, que cuando compran un departamento o un local de comercio sometido al régimen de Propiedad Horizontal, no solamente pasan a ser propietarios de su unidad sino que además, pasan a formar parte de una especie rara de sociedad con una multitud de consortes a quienes no conoce.

Además, con socios que van y vienen, que no son siempre los mismos, que venden y se van y otros nuevos que llegan y él no los conoce porque nadie se los presenta.

Cuando se encuentra en el ascensor con alguno de ellos, a veces no sabe bien si es un nuevo vecino o un ladrón.

Además, cuántos propietarios de unidades en PH saben que esa relación con los demás propietarios o consortes está regida por un contrato llamado "Reglamento de Copropiedad y Administración" redactado no por ellos sino por el dueño original del terreno o de la obra.
……………..

Hoy por hoy y sobre todo entre nosotros, los argentinos, rara vez nos expresamos usando conceptos.

No sé si se habrán dado cuenta (sobre todo durante las horribles y extenuantes asambleas) que la gente habla mucho pero raramente conceptualiza.

De modo que las discusiones en casi todos los ámbitos, desde el familiar hasta el político, son series de parlamentos que van y vienen y no se encuentran.

No se sacan conclusiones.

Quiere decir que cada uno sigue pensando como pensaba.

Durante una conversación, cada uno piensa lo que va a decir mientras el otro le habla y cuando le toca el turno habla o vocifera sin tener una idea clara de lo que quiere decir.

No existe la voluntad de escuchar.

Ni tampoco la capacidad de síntesis, que es lo único valioso del pensamiento y la discusión.

Son los conceptos y no la verborrea ni el exceso de análisis lo que permite verdaderamente sacar conclusiones y resolver problemas.

No exagero si digo que tal vez ese sea el principal defecto de los argentinos.

Y hoy más que nunca debemos repararlo porque hoy más que nunca tenemos la necesidad de unirnos contra la adversidad.

Y no hay otra forma de unión más eficaz que la palabra.

La palabra que convence.

La palabra que es capaz de vencer al contrincante con un arma poderosísima, que es la razón.

Lamentablemente debemos reconocer que muy poca gente sabe qué es un concepto y quién lo inventó.

En realidad, el concepto es una idea precisa.

Una frase breve que define lo que se piensa separándolo, abstrayéndolo de todo lo demás que la persona piensa, siente, desea o hace y fue inventado por Sócrates cinco siglos antes de Cristo.

Él nos enseñó que para hablar constructivamente debemos transmitir conceptos y no ideas vagas.

Esto implica sacarle a lo que vamos a decir, todo lo que sobra.

Mucha gente que viene a consultarme un problema de consorcio pero trae in mente un conjunto de problemas mezclados entre sí.

Entonces comienza relatándome sus penurias y la historia de su consorcio.

Y en esa relación errática se va por las ramas y así se aleja cada vez más de lo que viene a consultarme.

Los problemas, cuando se carece de conceptos, de ideas claras, se agigantan y se transforman en verdaderos infortunios, cuando no en pequeños infiernos.

Un problema debiera ser un desafío y no un martirio.

Porque el problema está allí para ser resuelto y no para llorar sobre él.

Dr. Osvaldo Loisi¸ La Administración de Consorcios de Propiedad Horizontal

http://www.ligadelconsorcista.org/node/453

La Ciudad Autónoma de Buenos Aires, políticamente, funciona como un Consorcio de Propiedad Horizontal.

Que en situaciones normales, es manejado de taquito por los Administradores; que solo tienen el inconveniente de los hinchapelotas que van a todas las Asambleas, al cuete.

El peligro es, cuando por desidia o impericia; se amontona la Masa Crítica de Consorcistas indiferentes, y se suman a los hincha pelotas.

El caso del PRO, que busco identificarse voluntariamente con la “experticia” gestionaría; los lleva a un “brete” voluntario, e irresoluble.

Es el despacho diario lo que los pone en evidencia; no la maldad ajena, o las operaciones rocambolescas.

Aun el caso de los “estudiantes”; que reclaman como las viejas de 4º C y 2º H, que se refaccionen los espacios comunes, y no la Toma del Palacio de Invierno.

A ello se suman los derrumbes de Urquiza y Palermo; que podrán ser fortuitos en el tiempo, pero eso no significa que sean improbables.

Como se puede ver en cualquier canal cultural; Nat Geo, THC, o Discovery; cuando transmiten programas sobre Accidentología Aérea.

Nunca es un solo factor; sino una sucesión de negligencias y/o desaciertos, que se van sumando hasta que sucede la desgracia.

En resumen; las elites políticas porteñas, y sus valedores mediáticos, eligieron una mirada administrativa y personalista de la Política para la Ciudad.

Y tanto Ibarra, como Macri, se “descascaran” por la imprevisión e impericia; en primer lugar.

¿Por qué no hay Crogmanones, Villa Urquiza, o Berara en el Conurbano; Rosario, o Córdoba?

Todos asumimos la corrupción existente en la cárcel de los pobres; pero no se incendian o derrumban las bailantas.

Tampoco se caen edificios, o hay accidentes laborales masivos.

Y en segundo, el enfoque personalista, los obliga a hacerse cargo; pues no hay estructuras políticas debajo de ellos.

Solo conmilitones de roscas, o Castings para la los focos mediáticos; y ninguno capaz de leer sus propios reglamentos.

http://www.buenosaires.gov.ar/areas/produccion/def_consumidor/consorcios.php?menu_id=10327

Nada que ver con la Ley de la Selva, que rige más allá de la General Paz.

3 comentarios:

guillermo mischkinis dijo...

Aun el caso de los “estudiantes”; que reclaman como las viejas de 4º C y 2º H, que se refaccionen los espacios comunes, y no la Toma del Palacio de Invierno.

Es interesante este párrafo, el sólo hecho de usar comillas connota que tal vez no sean estudiantes sino otra cosa.

Pero lo más interesante es que la afirmación resulta dudosa, toda vez que si efectivamente los estudiantes planteasen solamente mejoras edilicias, las tomas se levantarían luego de conocerse el plan de obras. No es así, justamente, porque en cierto imaginario de la paleoizquierda vernácula, efectivamente hay un Palacio de Invierno a ser tomado.

Anónimo dijo...

Estimado compañero: La constitución de la ciudad es lo más parecido a un reglamento de copropiedad. ¿O acaso no prevee -para una infinidad de temas- mayorías especiales al tiempo que incentiva la minirepresentación.

Un caso concreto de esquizofrenia institucional refrendada por un esquizofrénico.

A ello se suma la omnipresencia fáctica del -autorreferenciado por sus autores- Obelisco, antecedente del Pacto de Olivos y consagratorio del tomala vos dámela a mi que "...no vamo a divertir..." de Patricio y Amadeo.

Mi propuesta de "saneamiento institucional" es bregar por el lanzamiento de la fórmula de ambos para la Jefatura y Vicejefatura de Gobierno del engendro Autónomo de la Ciudad de Buenos Aires.

Va siendo hora de llamar al pan pan y al vino vino. Salute.

manolo dijo...

Guillermo
SON Estudiantes, sino los hubieran denunciado, como falsarios. ;-P
El “entrecomillado” esta relacionado con las “Instituciones” a las que concurren; en su mayoría son la “crema” del Sistema Educativo Argentino.
Equivalentes, para el Progresismo e Izquierda, a los Liceos Militares en los que cursaron Alfonsín, de la Rua, e anda mais.
El tema, es que la política de la CABA se nutre del Fubismo posmodernista; mucha “agitación” y poca “praxis”.
En comparación, los “pingüinos” chilenos, son el Komintern y la Compañía de Jesús, juntos.
En fin, es la mendacidad de la Administración y sus Voceros; quienes les dan entidad.
Son muy, pero muy, nabos; estos elegidos por Casting, no aguantarían una pulseada fuera de la General Paz.
Y no hablo solo del GBA; sino de Catamarca, Santiago del Estero, Misiones, Santa Cruz, Neuquén; etc.
Donde pueden terminar incendiando el Palacio, o tener muertos.
No saben hacer política CON plata, imagíneselos sin presupuesto.
¿Por qué cree, que tanto el Momo como Luisito, les rajan a los Amarillos?, si en teoría, M&M y FdN, arrasan.
Un abrazo