domingo, 16 de octubre de 2011

Trotsky y lo que siguió al 17 de Octubre de 1945.


Quede totalmente alelado, cuando me lo dijeron; que el Clasismo electoral enfocara sus cañones dialécticos contra Artemio López, como Usina Teórica del Kirchnerismo, cae dentro de los parámetros “históricos”; hacer clic aquí .

Pero que un simple operativo, como el que escribe, lo consideren un especulativo de volumen similar al menchevique devenido en perobolche militante; es a todas luces exagerado.

Compañeros T, deberían chequear mejor sus fuentes, para no gastar pólvora en chimangos; mi influencia intelectual, que es el fondo de la cuestión, es absolutamente marginal donde se toman las decisiones.

Solo soy un opinador de los bordes, que mal que bien, intenta generar respuestas a las preguntas que nadie quiere hacer; porque implican “costos políticos” su simple enunciación.

Ahora que están “embarcados” en la “hogueras de las vanidades”, del podrido parlamentarismo, saben de qué estoy hablando.

¿Ir a brindar, o no?, ¿Champú, agua mineral de las multinacionales, o de bombeador?

Esas minucias de la moral pequeño burguesa, que Lenin y Trotsky se pasaron por el forro de las pelotas, cuando el primero abordo el tren sellado en 1917.

Gestionado por Parvus, el del “estilo viril y musculoso” (hacer clic aquí), frente al Estado Mayor prusiano.

Un error muy común del Moralismo, como postura; es aseverar que el Maquiavelismo, o Realpolitiker según Marx, plantea que “el Fin justifica los Medios”.

Su obsesión por la justificación transfiere, como mecanismo psicológico, al otro sus propias taras.

Es el Fin, en si mismo, quien opta por los Medios mas eficaces, y no por otros; que desde la especulación teórica se pueden considerar mas adecuados.

Lo que vulgarmente se sintetiza como, “para hacer una tortilla hay que romper huevos”.

La historia argentina esta llena de quienes justifican su fracaso declarándose Campeones Morales.

Cuando se aborda a Gramsci, como campeón del estanilismo; y se comenta sobre “el Estado como espacio en disputa” y la Guerra de Trincheras”, se asume que es una contribución “original”.

Cuando en realidad es uno de los temas más importantes, y tradicionales, de la etapa histórica dominada por el capitalismo; que ya habían señalado Adam Smith, Lasalle y Eduard Bernstein.

Incluso lo considero Trotsky en sus últimos días, en su exilio mejicano, hacer clic aquí.

Como he señalado muchas veces, el Peronismo es Agnóstico frente al Determinismo; no hay Inevitabilidades Sociales e Históricas, solo hay Contingencias probabilísticas.

Donde las Tendencias, como señala Trotsky sobre el papel del Sindicalismo, enmarcan y constriñen las opciones.

El mismísimo 17 de Octubre no implicaba la inevitabilidad del peronismo.

- Si Borlenghi y Bramuglia hubieran ganado la votación dentro del PSA, el Viejo hubiera sido el primer presidente socialista de America.

- Si el Radicalismo no hubiera estado tan centrado en su ethos de Doctores y Ganaderos; JDP hubiera sido el tercer Radical, o sexto si contamos a Justo y Ortiz, en acceder multitudinariamente a la primera magistratura.

Eva Duarte era parte del círculo de Lebensohn; el Bebe Cooke era uno de los Jóvenes Radicales de los 30 y 40, como Jauretche y Forja.

El mismo Perón, por matrimonio y pertenencia al Justismo, orbitaba dentro del Radicalismo antipersonalista.

- Hasta era mas “probable”, sino no primara la ceguera frente al obstáculo epistemológico del 17 de Octubre; que el general fuera el candidato “natural” de la Unión Democrática de 1936, hacer clic aquí; que el de una “fuerza ad hoc” como realmente sucedió.

Lo que era inaceptable e inadmisible, dentro de la Izquierda y el Progresismo de la época, no era la “persona” Juan Domingo Perón; sino el papel que debía cumplir el Movimiento Obrero Argentino y sus Organizaciones DENTRO del Estado.

Desde ese entonces, se vive repitiendo esta lucha una y otra vez; donde los sectores de la pequeña burguesía, en defensa de las migajas del Estado que les deja el Establishment; se alinean, conciente o inconcientemente, con las posturas de este ultimo.

No VEN en el MOO un Aliado estratégico, sino un COMPETIDOR por los “enclaves” administrativos, que cualquier Estado de la Revolución Industrial debe desarrollar para cumplir con sus cometidos.

La mentalidad de burguesía semicolonial, donde el UNICO ascenso social es VIA las Profesiones Liberales y las Burocracias Administrativas y de Servicios, no solo frustra la generación de “Burguesías Nacionales Schumpeterianas”, sino que además genera una Hegemonía Cultural donde las Ciencias y Praxis productivas son consideradas “inferiores”, sin “prestigio”.

Abogados, Médicos, Psicólogos, Filósofos, Docentes de todo tipo, Artistas e Intelectuales; en ultima instancia, “cobran” del Estado Burocrático, no del Mercado en si.

La Universidad, la Educación y la Salud Publicas; no son vistos como herramientas de transformación, sino como “Nichos Ecológicos” donde pastar libremente.

Y por más que moleste a muchos amigos y compañeros, es algo demasiado evidente, como para que pase desapercibido por las Masas que están excluidas de “esos” comederos.

Es comprensible, y totalmente justificado, que se de la puja por las remuneraciones; pero para pedir solidaridad en la lucha, también hay que demostrar, como mínimo, que hay Voluntad en mejorar los servicios que se dan.

Y eso, es algo que se ha olvidado desde las primeras protestas de los 80, contra las políticas del Alfonsinismo.

Ahora bien, he hablado de la pequeña y mediana burguesía, además del Moviendo Obrero; pero ¿Qué pasa con el Establishment, sean la Multinacionales, la Oligarquía, o la Gran Burguesía?

Por un lado; la Crisis Global, y su Bancarrota Ideológica, los ha dejado desnudos simbólica y materialmente.

Por otro lado se dan dos situaciones inéditas; no disponen del Partido Militar, para remplazar la imposibilidad de construir una alternativa electoral viable, y sostenible, a la Derecha Social de la Administración.

Y además, han perdido los resortes para imponer un Golpe de Mercado; sea por corridas cambiarias y bancarias, o sea vía Inflación y Desabastecimiento.

Solo les queda “negociar” con la Administración, para evitar algo mas terrible que la bandera roja flameando en la Rosada.

Sufren un pánico inconmensurable, de solo pensar en las Jornadas de Junio y Julio de 1975, hacer clic aquí para leer a RW; mas que las movilizaciones en si, son las consecuencias.

La “sovietización” del proyecto de Afrio Penissi; tener que discutir paritarias con los libros sobre la mesa; que los margenes de apropiación de las diferentes plusvalías queden a la vista de TODOS.

Que se les dispute el CONTROL de la Economía, no la propiedad en si; que se blanqueen, laboral, financiera e impositivamente las zonas grises y negras desde donde pueden operar con impunidad.

Que ese envión, dada las condiciones del subcontinente y el mundo, se terminen generalizando en Sudamérica.

No tiene nada de sorprendente que un Intelectual de la Teoría de la Dependencia, y ex Presidente de Brasil, alerte sobre el peligro del Sub.peronismo, hacer clic aquí.

Territoriales y MMSS, articulados en y por los Sindicatos, se terminen apropiando de las Cajas.

Esas que ellos manejan como propias, y dejan propinas para las pequeñas burguesías Progresistas y/o de Izquierda.

El aquí y ahora, de la situación argentina, es incomprensible sin los telones de fondo del Mundo y del subcontinente.

Espero que no se cometan los mismos errores de apreciación que se cometieron el 17 de Octubre; lo improbable no es más que la pereza de animarse a pensar lo impensable.

Y no hace falta irse al 45.

7 comentarios:

Udi dijo...

No se gaste tanto Manolo, para ciertas esferas ideológicas la realidad se comporta de modo aberrante.

Andrés dijo...

Excelente post, Manolo. Quizás el post más sobrio, respetuoso y claro que haya leído en tu blog, sin perder estilo ni fundamentación.

Sólo una discrepancia, respecto a "el fin justifica los medios".

Si se acepta el criterio de que "el fin opta por los medios más eficaces", se legitiman las graves violaciones a los derechos humanos como las cometidas por los militares del Proceso. No se puede negar que, como medio para neutralizar a lo que quedaba de Montoneros u otras organizaciones armadas a partir de 1976, lo secuestros, las torturas y los asesinatos han sido muy "eficaces".

El problema más de fondo (en el caso de 1976, muy evidente) es que el "fin" no siempre es tan claro ni lineal, ni para las elites (que defienden a capa y espada sus intereses bajo excusa de otros fines) ni para otras organizaciones sociales.

Saludos,

Andrés

Bob Row dijo...

Ahora tengo la cabeza en otra cosa, pero quiero refrendar lo que dice Andrés sobre el equilibrio y la sobriedad de tu post. Y corregirlo levemente en cuanto a los objetivos de la represión de la Dictadura.
No se trataba ya de los restos de las organizaciones armadas sino de descabezar las representaciones directas de los trabajadores (delegados de fábrica) que eran de todos los colores y -desde el Rodrigazo- habían iniciado un proceso de radicalización y convergencia vertiginosos. Más allá de las jornadas de Junio-Julio que intentaban recomponer para el MOO lo conseguido en los dos años anteriores y que la banda desaforada de López Rega estaba hundiendo en el caos.
El resultado buscado (y obtenido) por la Dictadura fue el de instilar el pavor a iniciar otra disputa clasista sistémica por muchos años.

Por lo demás, tu texto está lleno de puntos interesantes para discutir en un lenguaje que has tenido la cortesía de acercar al de la tradición marxista. Es una pena que la respuesta de Rosso opte por retomar la perspectiva de la "descalificación de origen" apelando a ciertos discursos tácticos (como el de 1944) que tienen tanto valor textual como (por la opuesta) los anticlericales de la última etapa antes del golpe del '55.
Lo crucial de este trotskismo es no haber entendido los alcances de la modificación introducida por Trotsky en el concepto del "bonapartismo" para América Latina.

Es, precisamente, la no pertenencia del militar bonapartista (Cárdenas o Perón) a esa burguesía dependiente e incapaz de encarar las tareas "nacionales" (como hicieran las europeas antes) la que le permite tomar ciertas medidas audaces (lo hemos visto tras la derrota del '09) que, en última instancia, colocan al poletariado (y sectores postergados en gral) en mejores condiciones para disputar los límites de las legalidades y los derechos frente al Capital.

En fin, desde 2005 que he buscado dar ese debate inútilmente. Las agrupaciones trotskystas tienen su propia estrategia poco proclive al debate (aunque su probable institucionalización les obliga a bajar el tono de sus consignas). Lo más interesante se puede ver por fuera de ellas, como en "jugodeladrillo.blogspot", por ejemplo.

Un fuerte abrazo y ojalá nos veamos pronto Manolo.

Andrés dijo...

Bob,

A eso me refería, justamente. Que detrás del fin proclamado (aniquilar a la subversión) se escondía el fin realmente deseado y silenciado (neutralizar al capacidad de lucha de una buena franja de la población para rediseñar la sociedad a su conveniencia).

Saludos,

Andrés

Udi dijo...

La caracterización de Trotzky, no muy detallada, por cierto, puesto que le faltó tiempo para completarla, claramente menciona: "o maniobrando con el proletariado, llegando incluso a hacerle concesiones, ganando de este modo la posibilidad de disponer de cierta libertad en relación a los capitalistas extranjeros."
Este margen de maniobra, que una fracción del capital (el "nacional", en términos del propio León) aspira a conquistar, en alianza (temporal y contradictoria, como cualquier otra) con el proletariado, es también margen de maniobra para el proletariado, para quién la consecución de sus objetivos de máxima no impide - midiendo la siempre cambiante correlación de fuerzas - aprovechar la contradicción al interior del capital en beneficio de mejoras parciales.

Bob Row dijo...

Perdón, Andrés, tenés razón y yo había leído a las apuradas. Lo bueno es haber coincidido en la intención.

También debo disculparme por un debate cuyo comienzo no había leído, que yo creía inexistente y que había tenido mejor nivel (de fundamentación y racionalidad) de lo que hubiera esperado (recién lo ví por el link en este post).

Como aficionado asistemático a esas lecturas y tilingo de la cultura que soy me alegro de que esos debates puedan darse. Abrazos.

Bob Row dijo...

Bien, Udi. Pero, incluyendo eso y yendo más allá, lo que no se veía es que Cárdenas y Perón en su momento completaban tareas nacionales de las que las burguesías locales eran incapaces: a) completar la integración de la población marginada (campesinos en México, obreros aquí) b) recuperar el control de factores claves del desarrollo, como la renta petrolera, sentar las bases de una industria, etc.

Es fácil señalar las limitaciones de su alcance y ser ciego a lo que eso dejó como organización, fortalecimiento de la conciencia subjetiva de la clase, etc.

En un contexto muy diferente, en medio de una crisis global del Capitalismo, vemos que las políticas de integración continental seguidas por los diferentes gobiernos "bonapartistas" de la región han sido un dique para impedir que termináramos pagando el costo como antes.

Es una realidad que no puede despreciarse sin volverse irrelevante para quienes lo viven cotidianamente. Un abrazo.