miércoles, 31 de diciembre de 2014

El reparto del poder territorial en 2015, no se trata que sea posible, es necesario.



La Ciencia de Observación por excelencia, la Astronomía, tiene una madre que le incomoda muchisimo; la Astrología.

Kepler, uno de los gigantes mencionados por Newton, se ganaba el pan diario realizando cartas astrológicas para clientes selectos; los Poderosos de su época.

Aun con los errores de pronósticos habituales, en el Atlántico Norte las proyecciones basadas en series históricas son herramientas fundamentales para distinguir coyunturas de tendencias.

Así las Fuerzas políticas y los Factores de Poder operan, en tiempo real, sobre esas tendencias en defensa de sus propios intereses.

Trátese de escaños y/o Administración, o más crudamente, para influir en las partidas presupuestarias; origen de la recaudación y destino de las partidas.

La nota de 20minutos.es, hacer clic aquí, además de interesantes links estadísticos, nos permite acceder a un interesante trabajo que vemos en la imagen superior.

Que no solo detalla lo “nacional”, sino también lo sub-nacional, trátese de Autonomías, o de grandes municipios.


El trabajo de interpretación estadístico se basa en los trabajos de campo y conclusiones de la CIS; que como ya advertí en otra ocasión es un organismo estatal.

En fin, guste o disguste, las tendencias electorales para 2015 obligaran a las Fuerzas políticas argentinas a disponer de Grupos de tareas permanentes; para recolectar y analizar data.

Ya que en caso contrario, terminaran supeditadas a las operaciones de coyuntura; generadas por las Usinas de los Factores de Poder y sus Intereses permanentes.

Un par de ejemplos para que los ignaros no me acusen de críptico.

--El 8N fue una movilización espectacular, pero la simple comprobación de su origen de clase, gracias a las nuevas tecnologías; genero una serie de notas que encuadraba su impacto REAL en la llamada Sociedad Civil; que es la que se expresa mediante el sufragio.

--Los análisis de los resultados de las PASO y las Generales de 2013, sumados a los resultados de las subnacionales; pusieron en cuestión muchos de los sesgos cognitivos del llamado sentido común de las Minorías dirigentes.

Que va desde los potenciales “garrochazos”, al voto de clase del FIT, nacional y local.

En fin, que disfruten las lecturas.









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