sábado, 12 de mayo de 2018

La Republica “Quebrada”, crisis en la coalición Cambiemos por la Big data

El Establishment financiero global, con el Establishment “nativo” a remolque, pulverizaron las “ilusiones” de sus dos socios políticos de coalición.

El antiperonismo, supremacistas sociales, y los “Republicanos”, el No peronismo.

A pesar del “triunfalismo” posterior a las elecciones de 2017, los MERCADOS (Establisment de la globalización) analizando las “simulaciones de tendencias” posteriores, en las que lo electoral es un resultado más que una génesis; no daba por finiquitado al “hecho maldito del país burgués”, ni mucho menos.

Aun en el “desorden”, y con la “cancha electoral” absolutamente inclinada a favor del oficialismo nacional, cualquier “desconocido P” tenía las mismas probabilidades que Macri y/o Vidal de ganar en 1ª vuelta; y desde ya, si se pasaba a balotaje, la derrota de cualquier candidato de Cambiemos seria inatajable.

El gradualismo solo tenía una razón de ser, asegurar la victoria de 2019 de la Coalición oficialista, para continuar con el Plan (de Negocios) en aplicación.

Y al estar esta “comprometida”, se perdía todo “incentivo” para “continuar” con esta “estrategia socio política”, con conclusiones obvias para los MERCADOS.

“Tomar” todas las “ganancias” posibles, en el corto plazo, y “generar” las “condiciones objetivas” en el mediano plazo, para “disciplinar” a la sociedad y la administración ganadora en 2019.

Más que un “Menem 2.0”, se trataría de un Alexis Tsipras del Cono Sur.


Ahora bien, el desbarranco del “Circo Peña & Duran Barbas”, ha dado sed de venganza a los Word como el insigne @AsisOberdan

“Tenían afilada la Big Data y estaban ensoberbecidos por los focus groups de Durán Barba, que los mostraban ganadores hasta 2027.
Mientras asistían al desaforado avance de las tasas y del dólar, que subía y se rajaba del circuito”

El “timbrero” del Conurbano Sur, en sus tiempos mozos, en su justificada “sed”, omite un detalle no menor, la “interpretación”.

Como no recordar el “escarnio público”, por mandato de Balcarce 50 y la JGM, por lo siguiente:

“El gran dilema de Argentina es que con el Esquema Ponzi institucional estos muchachos pueden ponerse al país de sombrero pero las alternativas que asoman son alarmantes o peores”.


Los “mismos” datos crudos, generaban ditirambos entre la Claque permanente de los Media gráficos y audiovisuales, mientras que entre otros producía “recelos y aprensión” al “interpretarlos”.  

Resumiendo, no vamos hacia un 2001, sino hacia “Ámbito Financiero, 15 de diciembre de 1989”.

“La expresión surgió en Argentina en 1989, acuñada por el diario Ámbito Financiero para describir el fenómeno político-económico que causó la derrota electoral del presidente Raúl Alfonsín y su renuncia, llevando al ascenso anticipado del presidente Carlos Menem, ese mismo año, en medio de un proceso de fuga de divisas y un brote hiperinflacionario”




4 comentarios:

oti dijo...

¿Y el artículo de Fidanza del 30/12/17 en "La Nación"?

¿Y "la ambiciosa estrategia de Cambiemos"?

En fin...

Kgb dijo...

Pero... el mercado no son ellos?

Kgb dijo...

Pero... el mercado no son ellos?

Mar dijo...

Cambiemos (y el avatar de su encarnación estatal) no hace big data, y si la hace, la hace pésimamente. Esa incompetencia se revela especialmente grave cuando tenemos en cuenta la enorme masa de bases de datos que heredaron de la anterior gestión (la cual SÍ albergaba un proyecto de integración de las mismas en una arquitectura que, de haber persistido en el tiempo, hubiese tenido un futuro promisorio.) Cambiemos reemplaza los CRM específicos de las agencias federales por soluciones de Salesforce; el turfcutting por el timbreo; el phone canvassing por llamadas automatizadas con opciones discretas a ¡teléfonos de línea!, el microtargeteing por campañas de segmentación de Facebook de trazo grueso. Alguien le vendió a estos muchachos a precio muy caro algo que no compraron.