jueves, 27 de diciembre de 2007

Movimiento Nacional y la paradoja onda corpúsculo.

Izquierdas y Derechas, Colectivismo e Individualismo, como tantas antinomias deudoras del tercero excluido, es una debilidad del pensamiento académico.

El "tertium non datur" de Leibniz, FUE una poderosa herramienta para la abstracción de la realidad, y el desarrollo de la ciencia de la Ilustración.

Pero como Pigmalion, se enamoran de su abstracción olvidando que solo es una aproximación a la Realidad.

Esta negación es la causa de demasiadas desgracias, imitando a Procusto tratan de mutilar la Realidad a su gusto.

Como nos explicaba Jauretche; “el traje se debe adaptar al cuerpo, y no al revés”

Procusto, el estirador; también era conocido como Damastes; el avasallador, controlador o manipulador.

¿Conocen a algunos Damastes? ;-P

Llegan a tener conductas obsesivas compulsivas, como el detective televisivo, ante los rechazos de la Realidad.

Con la Luz, como fenómeno físico, nos encontramos con el mejor ejemplo de rechazo de los modelos estáticos.

Las primeras teorías comprensibles de la luz fueron expuestas por Christian Huygens, quien propuso una teoría ondulatoria de la misma, y en particular, demostrando que cada punto de un frente de onda que avanza es de hecho el centro de una nueva perturbación y la fuente de un nuevo tren de ondas.

Sin embargo, su teoría tenía debilidades en otros puntos y fue pronto ensombrecida por la Teoría Corpuscular de Isaac Newton.

En ella, Newton proponía que la luz estaba formada por pequeñas partículas, con las cuales se podía explicar fácilmente el fenómeno de la reflexión.

Con un poco más de dificultad, Newton pudo explicar también la refracción a través de lentes y la separación de la luz solar en colores mediante un prisma.

Debido a la enorme estatura intelectual de Newton, su teoría fue la dominante por un periodo de un siglo aproximadamente, mientras que la teoría de Huygens fue olvidada.

No sienten un déjà vu, si pensamos en ciencias sociales

Con el descubrimiento de la difracción en el siglo XIX, sin embargo, la teoría ondulatoria fue recuperada.

El experimento de la doble rendija, Young y Fresnel certifico científicamente las teorías de Huygens.

El experimento demostró que la luz, cuando atraviesa una rendija, muestra un patrón característico de interferencias similar al de las ondas producidas en el agua.

La longitud de onda puede ser calculada mediante dichos patrones.

Maxwell, a finales del mismo siglo, explicó la luz como la propagación de una onda electromagnética mediante las ecuaciones de Maxwell.

Tales ecuaciones, ampliamente demostradas mediante la experiencia, hicieron que Huygens fuese de nuevo aceptado.

Como en los noventa, siento a los amigos liberales, victoreando y aplaudiendo.

Pero el debate no había terminado.

En 1905, Einstein logró una notable explicación del efecto fotoeléctrico, un experimento hasta entonces preocupante que la teoría ondulatoria era incapaz de explicar.

Lo hizo postulando la existencia de fotones, cuantos de luz con propiedades de partículas.

En el efecto fotoeléctrico se observaba que si un haz de luz incidía en una placa de metal producía electricidad en el circuito.

Presumiblemente, la luz liberaba los electrones del metal, provocando su flujo.

Sin embargo, mientras que una luz azul débil era suficiente para provocar este efecto, incluso la más fuerte e intensa luz roja no lo provocaba.

De acuerdo con la teoría ondulatoria, la fuerza o amplitud de la luz se hallaba en proporción con su brillantez:

La luz más brillante debería ser más que suficiente para crear el paso de electrones por el circuito.

Sin embargo, extrañamente, no lo producía.

Einstein llegó a la conclusión de que los electrones eran expelidos fuera del metal por la incidencia de fotones.

Era el colmo.

El Foton se comporta como una onda en fenómenos como la refracción que tiene lugar en una lente, o en la cancelación por interferencia destructiva de ondas reflejadas; sin embargo, se comporta como una partícula cuando interacciona con la materia para transferir una cantidad fija de energía.

Además de energía, los fotones llevan también asociada una cantidad de movimiento y tienen una polarización.

Siguen las leyes de la mecánica cuántica, lo que significa que a menudo estas propiedades no tienen un valor bien definido para un fotón dado.

En su lugar se habla de las probabilidades de que tenga una cierta polarización, posición, o cantidad de movimiento.

Por ejemplo, aunque un fotón puede excitar a una molécula, a menudo es imposible predecir cuál será la molécula excitada.

La descripción anterior de un fotón como un portador de radiación electromagnética es utilizada con frecuencia por los físicos.

Sin embargo, en física teórica, un fotón puede considerarse como un mediador para cualquier tipo de interacción electromagnética.

Como lo señalo De Broglie:

Toda la materia presenta características tanto ondulatorias como corpusculares comportándose de uno u otro modo dependiendo del experimento específico.

La pregunta fundamental entonces pasó a ser: ¿cómo unificar la teoría ondulatoria de Maxwell con la naturaleza corpuscular observada experimentalmente?

La respuesta a esta pregunta mantuvo ocupado a Einstein el resto de su vida, y fue resuelta dentro de la electrodinámica cuántica y de su sucesor, el modelo estándar de la física de partículas.

Algunos físicos íntimamente relacionados con el esfuerzo por alcanzar las reglas de la mecánica cuántica, han visto este debate filosófico sobre la dualidad onda-corpúsculo, como los intentos de sobreponer la experiencia humana en el mundo cuántico.

Dado que, por naturaleza, este mundo es completamente no intuitivo, la teoría cuántica debe ser aprendida bajo sus propios términos independientes de la experiencia basada en la intuición del mundo macroscópico.

El mérito científico de buscar tan profundamente por un significado a la mecánica cuántica es, para ellos, sospechoso.

Entonces, cuando se nos interrogue sobre la calidad de Izquierdas o Derechas de los Movimiento Nacionales ya tenemos una aproximación cuantica:

Todo Movimiento presenta características tanto de izquierda como de derecha, comportándose de uno u otro modo dependiendo de la Realidad Nacional específica.

Sus reglas de funcionamiento, por su naturaleza, deben ser aprendidas bajo sus propios términos, independientes de la experiencia basada en las Teorías del Mundo Central.

http://es.wikipedia.org/wiki/Principio_del_tercero_excluido

http://es.wikipedia.org/wiki/Efecto_Pigmali%C3%B3n

http://es.wikipedia.org/wiki/Procusto

http://es.wikipedia.org/wiki/Trastorno_obsesivo-compulsivo

http://es.wikipedia.org/wiki/Maqueta

http://es.wikipedia.org/wiki/Dualidad_onda_corp%C3%BAsculo

http://es.wikipedia.org/wiki/Fot%C3%B3n








miércoles, 26 de diciembre de 2007

Síndrome de abstinencia y Felices Fiestas.

Una semana sin Internet gracias a las fallas del 1º Mundo, el sistema contable no me emite la factura, ni registra los pagos.

Ergo, soy un foton sin destino pero con fecha de vencimiento.

A todos los amigos mis deseos de un fructífero 2008, si el derrumbe de Wall St. no nos alcanza antes; y las correspondientes disculpas por el atraso.

La viñeta que encabeza el texto solo sintetiza lo que veo, y mis deseos de “confraternizar” con la/os piensan diferente.

Un abrazo y a besarse mas, que bien nos hace falta

martes, 18 de diciembre de 2007

¿Deberían poder declararse en quiebra los países como Argentina?


Comentario
Anne Krueger
Primera Subdirectora Gerente del
Fondo Monetario Internacional
El Pais
18 de enero de 2002

English

Publicado en El País. Distribuido por Los Angeles Times
Syndicate International.

Es famosa la frase de Walter Wriston, ex presidente de Citibank, de que los países no van a la quiebra. Pero a lo largo de los dos últimos siglos, más de 90 han incumplido el pago de sus deudas y varios de ellos lo han hecho en repetidas ocasiones. Al anunciar una moratoria a finales del año pasado, Argentina sólo se convirtió en el ejemplo más reciente.

El incumplimiento de los pagos siempre es doloroso, tanto para los deudores como para los acreedores. Y así debe ser. Los países -como las empresas y los particulares- deben pagar sus deudas y sufrir cuando no lo hacen. De otro modo, la gente no estaría dispuesta a prestarles dinero y les resultaría mucho más difícil financiar las inversiones. Pero cuando las deudas de un país llegan a ser auténticamente insostenibles, resolver el problema pronto y de forma ordenada redunda en el interés de todos.

Desgraciadamente, no es algo que ocurra con demasiada frecuencia. Del mismo modo que cuando tenemos dolor de muelas retrasamos hasta el último momento la visita al dentista, los gobiernos intentan a menudo posponer lo inevitable. La consecuencia es que los ciudadanos del país que deja de cumplir sus pagos sufren más dificultades de las necesarias, y a la comunidad internacional se le complica la tarea de ayudar a recoger los trozos.

La lección está clara: necesitamos mejores incentivos para reconciliar a deudores y acreedores antes de que unos problemas solucionables se conviertan en auténticas crisis. El equipo directivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) ha estado estudiando la manera de hacerlo, estudiando los procedimientos de suspensión de pagos empresariales en Estados Unidos, regulados por el artículo 11. Aún estamos lejos de tener una propuesta formal, pero esperamos discutir estas ideas con nuestra junta directiva y otras partes interesadas en los próximos meses.

Cuando nos planteamos la posibilidad de un nuevo enfoque, lo primero que hicimos es preguntarnos por qué algunos países esperan tanto tiempo para reestructurar las deudas insostenibles. La resistencia a enfrentarse a conflictos económicos y políticos es evidentemente parte de la respuesta, y ningún planteamiento nuevo puede ni debe descartarla por completo. Pero también son importantes las barreras logísticas y legales.

Si la reestructuración de la deuda ya era bastante difícil en la década de los ochenta, cuando para congregar a la mayoría de los acreedores de un país no había más que reunir a 15 banqueros en torno a una mesa, las cosas son mucho más complicadas ahora. En los últimos años, los países han tomado prestado cada vez más dinero a través de la emisión de bonos y recurriendo a los bancos. Los bonistas son más numerosos, anónimos y difíciles de coordinar. Esto complica el 'problema de acción colectiva' de lograr que los acreedores se pongan de acuerdo sobre las condiciones de la reestructuración, aunque prácticamente todos ellos saldrían beneficiados.

La consecuencia es que todo el mundo prevé una reestructuración difícil y desordenada, y ello posibilita que los acreedores se peleen entre sí por ser los primeros a quienes se les devuelva el dinero. En vez de buscar salidas precipitadas, tenemos que crear mejores incentivos para lograr que los acreedores sigan interesados.

Otro impedimento para una reestructuración ordenada ha sido la creciente amenaza de acciones legales. Esto se debe en parte a que los bonistas que aspiran a ser reembolsados no tienen que compartir las costas de los pleitos con otros acreedores, como tienen que hacer los bancos. Una segunda razón es que los litigantes han superado recientemente una de las barreras tradicionales para demandar a gobiernos deudores, es decir, la dificultad de localizar y confiscar sus bienes. En un caso reciente, por ejemplo, un 'fondo rapaz' chantajeó de hecho a Perú al convencer a los tribunales de EE UU y Europa de que le impidieran pagar sus deudas a otros acreedores. No está claro si esta técnica sobreviviría una recusación legal en casos futuros, pero subraya un problema más general.

¿Cómo podría ayudar la comunidad internacional? Una respuesta sería que el FMI prestara a un país todo el dinero que éste necesitase para rembolsar la deuda a sus acreedores. Pero esto sólo serviría para que los países acumularan deudas indefinidamente. En cualquier caso, nuestros recursos son limitados, entre otras cosas por las reservas de nuestros miembros a la hora de emplear el dinero de los contribuyentes para ayudas de emergencia a los acreedores particulares. Son unas reservas justificadas. Los inversores y prestamistas serían mucho más imprudentes si vieran que el FMI espera en el banquillo para garantizarles que les devuelven su dinero. Del mismo modo que esperamos que los prestatarios devuelvan sus deudas, deberíamos esperar que los que prestan sean responsables de los riesgos que corren.

Inspirarse en los procedimientos de suspensión de pagos empresariales tiene mucho sentido. Podríamos instaurar incentivos mejores creando un marco legal predecible que, con toda probabilidad, no habrá que activar formalmente con demasiada frecuencia. Un país podría recibir protección legal de sus acreedores durante un periodo de tiempo establecido mientras negocia una reestructuración. A cambio, estaría más obligado a negociar de buena fe y a adoptar políticas que enderecen su economía. Por último, una vez que la reestructuración haya sido aprobada por una mayoría suficiente de acreedores, los que no estén de acuerdo estarán obligados a aceptarla.

Estos rasgos clave deberán tener carácter de ley en todo el mundo, lo cual no será fácil de conseguir. Pero cuando entren en vigor, si es que lo hacen, probablemente servirán de catalizador y animarán a los deudores y acreedores a alcanzar un acuerdo por propia voluntad. Al igual que sucede con los procedimientos de quiebra domésticos, la mayoría de la reestructuración probablemente se desarrollaría 'a la sombra de la ley'.

Las ventajas serían considerables, y no sólo para los deudores. Al eliminar gran parte de la incertidumbre que rodea el proceso de reestructuración, los acreedores descubrirán que el valor de sus propiedades en países con mercados incipientes se mantiene mucho mejor si tropiezan con dificultades económicas. Y, al ayudar a los inversores y prestatarios a diferenciar más claramente entre riesgos buenos y malos, un mecanismo de quiebra internacional podría ayudar a los países con una política correcta a conseguir capital más barato. También incrementaría la eficacia y estabilidad del sistema financiero mundial.

Naturalmente, hay muchos obstáculos prácticos y políticos para poner en práctica este tipo de planteamiento. Con la mejor voluntad del mundo, tardaría dos o tres años en implantarse. Por desgracia, no podrá ayudar a Argentina a superar sus actuales dificultades. Pero, como inversión en una economía mundial más fuerte y menos propensa a las crisis en el futuro, la idea vale la pena.

IMF EXTERNAL RELATIONS DEPARTMENT
Public Affairs: 202-623-7300 - Fax: 202-623-6278
Media Relations: 202-623-7100 - Fax: 202-623-6772

lunes, 17 de diciembre de 2007

¿Progresismo a U$S 0.26 por día?



¿Es posible un gobierno Progresista en La Matanza?

Anoche cenando con un montón de amigos de la blogosfera, se debatieron una infinidad de temas.

Valijas, cambio de administraciones, sindicatos, como se construyeron y/o construyen proyectos políticos; etc.

El último ítem contiene la pregunta que desvela al país político, desde hace 60 años.

¿Es posible superar al peronismo?, si sigue existiendo, por supuesto. ;-P

Macri, Binner y Ríos dan sus primeras directivas, deben demostrar que pueden gestionar la cosa pública.

Diferenciarse de las Administraciones anteriores, sumándole Republicanismo o Eficiencia.

Por ser el más “Facho” de la mesa, me tocaba defender la Ortodoxia.

La “decisión” no la discute nadie, pero las “formas” siguen estando en cuestión.

A las eternas comparaciones del Rosario Socialista y el Morón Progresista, se le suma la CABA de Macri.

Todos sabemos que para ganar en el país, hay que ganar en la PBA, y para ganar en esta ultima se tiene que descontar la diferencia en La Matanza.

Baluarte impenetrable de pejotismo, gracias al clientelismo.

¿Gracias al clientelismo?

Veamos si es tan así.

Cuando tenemos dudas sobre una cuestión volvemos a Perón.

¿Qué carajo hubiera hecho el Viejo?

Y se ve que se apiado de mí, me ilumino con el recuerdo de Figuerola. (Video)

Para comparar lo cualitativo, primero se debe comparar lo cuantitativo.

¿Con que contamos?

La tabla que encabeza este post tiene los datos oficiales de los presupuestos y habitantes de La Matanza, Rosario y Morón.

En la última fila me permití unir a los dos municipios opositores, que tienen en conjunto la misma cantidad de población que el bastión oficialista.

Se calculo el presupuesto en U$S a 3.20 por peso, y se dividió por la cantidad de habitantes y año calendario.

Como podemos ver, administrar LM cuesta U$S 94.90 por año habitante.

Mientras que R es de U$S 259.15 y M de U$S 182.50.

Por ultimo, tenemos los porcentajes de cuanto se tendría que aumentar los presupuestos, para tener la misma capacidad de gestión que en los Municipios modelos.

Si no se cuenta con la posibilidad de lograr esos incrementos, ¿es posible cambiar el asistencialismo realmente existente?

No debemos olvidar las diferencias poblacionales, “Rosaron” tiene una población mas diversificada que LM.

Esta ultima, es el mayor bolsón de población con NBI del país.

El argumento sobre la voluntad de la Mazorca, de mantener sujetada en la pobreza a sus votantes, queda bastante herida.

Mi insistente y pesada cantinela, sobre la inexistencia del Estado en el Conurbano, tiene un par de datos de peso.

Eliminar las redes de asistencia clientelistas, sin fortalecer los servicios esenciales, que debe proveer la Administración Publica es un Suicidio.

Reformulo la pregunta que da comienzo al post:

¿Es posible un gobierno Progresista en la PBA?

Fuentes

http://www.lamatanza.gov.ar/?dir=economia/presupuesto&sub=2#top

http://www.lamatanza.gov.ar/?dir=partido&seccion=poblacion.asp&sub=1

http://www.moron.gov.ar/laciudad/index.php

http://www.moron.gov.ar/transparencia/presupuesto_2007.php

http://www.rosario.gov.ar/sitio/caracteristicas/estadistica1.jsp?nivel=Caract&ult=C_2

http://www.rosario.gov.ar/sitio/verArchivo?id=598&tipo=objetoMultimedia

Sobre Figuerola

http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/cash/2-2003-05-31.html